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José Luis Álvarez Almeida, presidente de Otea. PABLO LORENZANA
«En hostelería ya nadie paga en 'negro'. Pongo la mano en el fuego»

«En hostelería ya nadie paga en 'negro'. Pongo la mano en el fuego»

José Luis Álvarez Almeida, presidente de la patronal Otea: «Tenemos un problema con la formación, que está obsoleta. Hay módulos para aprender a hacer un sándwich, pero no para ser escanciador»

CHELO TUYA

gijón.

Lunes, 24 de febrero 2020, 17:30

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En 2009 llegó a un cargo en el que sigue. Fue elegido presidente de Hostelería de Asturias, entidad que en 2015 se fusionó con Hostelería de Gijón y Unión Hotelera para crear Otea. Es hoy la mayor patronal turística de la región, al sumar Campins y Arca. En noviembre se enfrenta a unas elecciones marcadas por la ruptura de Otea con la Mesa de Turismo de Fade, tras ser destituido de la ejecutiva de la patronal. José Luis Álvarez Almeida niega personalismos y reivindica el peso del turismo en la región.

-En Fitur vendieron el antroxu. ¿Se tradujo en visitas?

-Es pronto para decirlo. Esta fue una idea de Fernando Corral, vicepresidente de Otea. La llevamos el año pasado con Gijón, Oviedo y Avilés y, este año, sumamos Mieres y Cangas del Narcea. Pero el problema de esta región es crear paquete turístico.

-Lo llevan diciendo décadas.

-Es que no se han hecho talleres formativos. Sabemos vender un vermú, pero nos falta ir más allá.

-¿Es un problema del Principado? ¿Del sector? ¿De ambos?

-Es empresarial, pero tiene que haber un apoyo institucional. Y esa línea nunca se trabajó. No obstante, ahora tenemos un sector turístico maduro. Creo que el balance turístico es positivo.

-Con récord de viajeros y reservas, ¿puede decir otra cosa?

-Que tenemos baja rentabilidad. En esta legislatura los retos son muy importantes.

-¿Que haya más gasto turístico?

-Claro. Tenemos que subir el precio medio de las habitaciones dando valor añadido. Está claro que Oviedo, Gijón y Avilés tienen una potenciación clara en congresos. Le hemos dado un documento a la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, que es como la carta a los Reyes.

-¿Qué le piden?

-Un Observatorio Turístico Regional. Sin datos estamos perdidos. Están los del INE y los del SITA, pero no son suficientes.

-Gijón se ha peleado con el INE.

-No voy a cuestionar al INE. Voy más allá, al famoso 'big data', que nos dice cuándo vienen los turistas, cómo y para qué. Me consta que la viceconsejera está en ello.

-¿Para eso hay dinero?

-Llevo diez años como presidente de Otea y no conozco ningún gobierno que me haya dicho que hay dinero para hacer cosas.

-¿Ninguno?

-Ninguno. Sin embargo, después aparece dinero para una campaña de medios o un acuerdo con unos aviones...

-La viceconsejera creó alarma al desvincular vuelos y turismo.

-Creo que lo que quiso decir es que, pese a tener solo una ruta internacional, batimos récord. Otea reclama mejores conexiones, claro, y estamos muy contentos con el proyecto del director de Movilidad y Conectividad. Volotea está bien, pero necesitamos conexiones con París.

Subvenciones a medida

-500.000 euros hubo para promocionar las marcas turísticas. Se acusó al Principado de hacer un traje a medida de Otea.

-Mejorar las marcas fue una idea de Otea. Hicimos un plan y se lo presentamos al Gobierno. Luego sacó la ayuda a concurso y hubo quejas, así que la anuló. El Principado sabrá cómo promociona ahora las marcas. Mi responsabilidad es crear riqueza. De hecho, el otro reto es crear empleo.

-¿Empleo bueno?

-Para mí todo el empleo es bueno. El que no lo es está fuera de la legalidad y no compete a Otea.

-En su sector, ¿no se trabajan más horas de las contratadas y se pagan sueldos en 'negro'?

-Mire, eso acabó.

-¿Qué se acabó?

-En hostelería no se paga en 'negro'. Pongo la mano en el fuego.

-No la ponga, que se quema.

-No me quemo, la pongo por la gente con la que me relaciono, la que está en mi asociación. O al trabajador le vas con las cosas claras o él decide dónde trabaja.

-¿Lo dice en serio?

-Eso de trabajar 16 horas y pagar 500 euros en 'negro' no existe. A ver, de 25.000 trabajadores habrá cien en esa situación.

-Pueden salir más de cien negando su versión.

-Si lo hacen estaré ayudando a que esta región sea más rica. Como presidente de Otea y responsable de una empresa con catorce trabajadores no puedo permitir que el que tengo al lado trabaje en condiciones distintas a las que marca la ley. Aunque con el horario pido una reflexión.

-¿Cuál?

-Ahora es legal que una persona trabaje ocho horas en una empresa y, si quiere, otras ocho en otra. ¿Por qué no dejar que el que quiere ganar más trabajando más horas en el mismo sitio lo haga?

-¿Para evitar que se le obligue a trabajar más de ocho horas?

-Hablamos de personas que lo harían voluntariamente. Para un hostelero, el coste medio por trabajador son 2.000 euros cada mes, entren o no clientes.

-¿Les afecta la subida del Salario Mínimo Interprofesional?

-No, a la hostelería lo que le está haciendo un daño tremendo es el salario social.

-¿Por qué?

-Nuestro sector tiene muchos puestos a cubrir sin formación. Pues bien, si quieres contratar un extra (auxiliar, limpieza...) para el fin de semana y pagarle 250 euros, si está cobrando el salario social se lo descuentan. Y no le compensa. Ojo, no le culpo. Yo también diría que no.

-Entonces, no es el salario social el problema, sino la gestión.

-Lo que proponemos es que a alguien que está cobrando 472 euros de salario social, si puntualmente hace servicios de extras y cotiza y puede ganar 250 euros más, ¿por qué se lo vamos a quitar? La única forma de salir del salario social es trabajando.

-¿Son ustedes el motor del empleo en Asturias?

-Tenemos el problema de la falta de formación. Tenemos un proyecto piloto de formación dual, porque la actual no es específica para el sector. La formación está obsoleta. Tienen un módulo para aprender a hacer sándwich y no hay cursos de escanciador.

-¿Qué deberían aprender?

-Hoy en día, la venta emocional hace el 70% del negocio de hostelería. Igual que el 70% de los problemas que tenemos es por resolución de conflictos entre compañeros. Necesitamos cursos para resolver conflictos.

«La voz del sector es Otea»

-Un curso de esos le iría bien para arreglar lo suyo con Feito.

-No. Con Belarmino Feito (presidente de Fade) entré un 14 de agosto en una terraza de Gijón y nos sentamos a diseñar la nueva Fade. Pero Fade nos importaba poco, lo que queríamos era diseñar la nueva Asturias, crear un nuevo clima. Usar Fade para cambiar cosas.

-¿Y qué pasó?

-Cuando hay conflicto creo que el problema es de ambas partes. Represento a un sector al que nadie regaló nada. Yo ya sabía lo que era ser presidente de una entidad, estar en un comité ejecutivo, tener cargos de responsabilidad de Fade. Él pensó que Fade tenía que discurrir por otro camino y vino el distanciamiento.

-¿Y las broncas?

-Yo nunca discutí con Belarmino. Ni cuando me destituyó por teléfono. Mis únicos comentarios contrarios fueron en el seno del consejo ejecutivo de Fade.

-¿Irse de la Mesa de Turismo no pone en peligro al sector?

-No. La voz del metal quién es ¿Fade o Femetal? ¿Y la de la construcción? Pues con el sector turístico pasa igual. La voz es Otea. Estoy muy honrado de que fuese una decisión unánime de Otea.

-Incluso le apoya un vicepresidente con el que había roto, Javier Martínez.

-Creo que el sector ha demostrado su madurez.

-¿Teme que le pongan un contrincante en las elecciones?

-No sé si me presentaré. Eso sí, Otea puede elegir al presidente de Fade, pero Fade no al de Otea.

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