El HUCA estudia reabrir la UCI del gimnasio por el incremento de casos

Los efectos de la Semana Santa y el que podría considerarse el efecto de la cuarta ola comienza a dejarse notar en los hospitales. A diferencia de los intervalos mesetarios en periodos anteriores, la ocupación de plantas y, especialmente, de las unidades de críticos no bajó lo suficiente para afrontar un nuevo incremento de pacientes con la holgura que sería deseble. Según el mapa semafórico del Ministerio de Sanidad, la situación de las UCI en Asturias –ocupadas al 20,86% según la Consejería de Salud– es de riesgo alto.

No obstante, esta cifra es bastante más elevada si uno se fija en el de referencia en la región, el HUCA. Solo aquí, el Sespa lo sitúa por encima del 42% –pacientes covid y no covid– y ello a pesar de que suma las plazas adicionales con las que cuenta desde que arrancase la crisis sanitaria. Si se tiene en cuenta únicamente la ocupación de la UCI convencional, lleva completa desde el inicio de la pandemia.

Para hacer frente, el HUCA fue habilitando espacios adicionales para acoger pacientes críticos con covid que, además por sus características, tiene estancias más prolongadas. En la primera ola se preparó la zona del vestuario, que no llegó a usarse. Ya en la segunda hubo que echar mano de ella, como también de las dos que se habilitaron en el gimnasio. La UCI provisional del vestuario nunca volvió a cerrar aunque a día de hoy tiene pocos pacientes. Sí lo hicieron las del gim nasio hace un mes ante la mejoría de la situación. Fuentes sanitarias afirman que el goteo incesante de pacientes de los últimos ya está haciendo plantearse volver a abrir estos espacios. El perfil de los críticos sigue siendo gente mayor pero, con el efecto de la vacunación, la media de edad ha bajado desde hace un año hasta los 62 años de lo que llevamos de 2021.

No obstante, el Hospital de Cabueñes de Gijón, que tiene menos camas habilitadas para pacientes covid, está en niveles de ocupación mayores que los del HUCA. Según los últimos datos publicados por le Sespa, a lunes, rozaba el 60%, doce pacientes de las 29 camas habilitadas. En peor situación estaba el Valle del Nalón, que sumados los ingresos en UCI con coronavirus, su ocupación llega al 70%. El San Agustín de Avilés, en esa misma fecha estaba al 36,11%. El resto, están más aliviados por debajo del 15%.

Solo ayer se produjeron 5 ingresos más en UCI, tres más que el día anterior, y ya suman 68 en toda Asturias. En planta la situación no fue mucho mejor. Solo en veinticuatro horas crecieron de 18 a 28 pacientes más, uno de los datos diarios más altos de lo que llevamos de mes. Si se tiene en cuenta que también se dieron más altas, 32 por las 5 del lunes, la foto fija es de 174 pacientes, 23 más que el viernes.

La Consejería de Salud decidió ayer prorrogar hasta el 27 de abril –14 días revisables– el cierre perimetral de Langreo y el resto de medidas asociadas al nivel 4+. Para tomar esta medida, las autoridades sanitarias advierten que no se cumple la condición de llevar 7 días consecutivos o más con niveles de incidencia acumulada a 14 días (IA14 global) por debajo de 325. En las dos últimas jornadas contabilizadas la incidencia acumulada fue de 383 y 403.Otro de los municipios que preocupan, aunque aún no esté en los parámetros para entrar en nivel de máxima alerta, es Llanes. Su incidencia acumulada a siete días (IA 7) sigue subiendo y ayer se situó en los 215 casos por cada cien mil habitantes, el dato más alto desde principios de febrero.

Además, ayer en Salud notificó 118 casos más y dos fallecimientos, una mujer de 86 años y un hombre de 83.