El HUCA, segundo hospital español que integra una prótesis dentro del fémur de un paciente amputado
La persona sometida a esta técnica innovadora, un gijonés de 43 años con malformación congénita en una pierna, «llega a sentir si pisa hierba o un suelo empedrado»
El HUCA vuelve a marcar un hito a nivel nacional al convertirse en el segundo hospital español que implanta una prótesis integrada directamente en el interior del fémur de un paciente amputado de 43 años. Un equipo de treinta personas, liderado por los doctores David Alonso y José Antonio Fidalgo, han conseguido dar a este gijonés con malformación congénita una solución médica inspirada en los implantes dentales que ha sido sido desarrollada por el Macquarie University Hospital de Sidney y que, hasta este momento, sólo se llevaba a cabo en el Vall d'Hebron de Barcelona.
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La intervención se realizó el pasado mes de mayo y el paciente se encuentra en fase de rehabilitación, caminando ya con la ayuda de dos muletas. En una siguiente fase, pasará a caminar con un único apoyo. Así, hasta la recuperar la funcionalidad de su extremidad. La idea es «devolverle la independencia funcional para que pueda recuperar la mayor normalidad en su vida cotidiana».
Según explican los doctores David Alonso y José Antonio Fidaldo, que hoy presentaron esta nueva técnica junto a la directora del HUCA, María José Villanueva, el paciente seleccionado «llega a sentir si pisa hierba o un suelo empedrado», algo que no ocurre con las procedimientos convencionales. Pero las ventajas de esta prótesis transcutánea osteointegrada van mucho más allá, ya que permite al paciente colocar su pierna artificial en tan solo 10 segundos, permite una mayor movilidad de la cadera, evita las intolerancias cutáneas de los «encajes» tradicionales y también las molestias y dolor en los muñones.
El «vástago» de titanio introducido en el canal medular del fémur del paciente -se inserta a presión en el hueso- procede de Australia y está hecho a medida. El HUCA, que coloca unas 90 prótesis al año, estima que «tenemos unos cinco o seis personas que podrían ser candidatos» a esta alternativa terapéutica de última generación, indicada en casos de pacientes jóvenes con amputaciones complejas y problemas para tolerar la prótesis convencionales. Además, no pueden fumar y el origen de su lesión no debe ser vascular.
«Ofrecer esta solución innovadora es fruto de un gran trabajo colectivo, seña de identidad de este hospita. Podemos sentirnos orgullosos», puso en valor la directora del HUCA, donde los doctores Alonso y Fidalgo ya están estudiando la posibilidad de extender la implantación de este tipo de prótesis también a las extremidades superiores. En concreto, están revisando el caso de un avilesino con amputación transhumeral al que se pretende colocar un brazo artificial con sensores que permiten la movilidad de la mano.
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