Las marañuelas buscan su sello de calidad

Varios colectivo de productores de marañuelas de Candás y Luanco se han puesto en marcha para que este tradicional postre cuente con un sello identificativo. Y para lograrlo han pedido el apoyo de los ayuntamientos de Carreño y Gozón.

Pero la alcaldesa de Carreño, Amelia Fernández, matiza que la iniciativa de que las marañuelas puedan contar con un sello de Indicación Geográfica Protegida (IGP) no puede ser impulsada por las administraciones locales. Según explica, los pasos que se deben llevar a cabo pasan por definir qué tipo de marca consideran más identificativa para el producto.

Fernández detalló que en la actualidad existen tres denominaciones que se establecen desde la UE y otra más de ámbito autonómico bajo el nombre Alimentos del Paraíso Natural. Las comunitarias son la Denominación de Origen Protegida (DOP), la Indicación Geográfica Protegida (IGP) y la Especialidad Tradicional Garantizada (ETG).

En el caso de las marcas comunitarias, la solicitud solo puede ser presentada por una agrupación de operadores que trabaje con el producto y los solicitantes deberán acreditar su vinculación profesional, económica y territorial con el producto. En cuanto al autonómico, es también una agrupación de productores la que ha de proponer al Principado que prepare y apruebe el pliego de condiciones al que debe someterse el producto para el que se pide el uso de la marca. Ahora bien, solo dos tipos de marcas pueden incluir en su denominación el nombre del lugar -'de Candás' o 'de Luanco', en este caso-: la DOP y la IGP.

No obstante, la alcaldesa advierte de que el procedimiento es largo, que se puede prolongar varios años. Y que lo más conveniente es que aquellos productores que pudieran estar interesados y dispuestos a asumir los costes se pongan en contacto con la Consejería de Desarrollo Rural para conocer el proceso.