Carreño ofrece en adopción diez perros abandonados en las vías públicas

En palabras del concejal de Medio Ambiente, Gabriel Rodríguez, «esta irresponsabilidad tiene consecuencias directas tanto para estos animales como para la administración local. De esta forma, el Consistorio cumple con la normativa que señala que transcurrido un plazo de ocho días, si el animal no es reclamado pasará a ser propiedad municipal, lo cual genera un gasto extraordinario. Al mes, entre alojamiento, manutención y cuidados veterinarios el Ayuntamiento gasta una media de casi 3.000 euros mensuales», explicó.