La mejora de la red de cercanías empezará por las líneas con más pasajeros

El Plan de Cercanías de Asturias 2017-2025, presentado en diciembre, prevé mejoras que superan los 600 millones y que los sindicatos y usuarios afirman que todavía no están llegando a la red. Tanto Adif como Renfe se encuentran en una fase de redacción de algunos proyectos incluidos en el programa y revisión de los pliegos y documentos dejados por el equipo anterior. El Gobierno central ha emitido señales distintas, asegurando por una parte que el plan se mantenía, pero anunciando también la licitación de un nuevo estudio informativo sobre la cuestión. Lo que se sabe por ahora es que esos 600 millones irían llegando repartidos en los ocho años del plan y que, además, existen prioridades.

«Se procura que las actuaciones a corto plazo pongan el foco en la fiabilidad del servicio y la experiencia del usuario», especifica el Gobierno central ante las preguntas que les cursó Segundo González, diputado de Podemos. Dado que las cancelaciones en el ancho métrico (el vinculado a Feve) se cuentan por centenares al año, parece lógico dedicar los primeros esfuerzos a erradicar ese tipo de problemas. Sin embargo, no es el único criterio a aplicar. Según la contestación, se está realizando también «una prognosis de la demanda para identificar los principales ejes de actuaciones que han de implementarse en cada caso». Es decir, dentro de esa cartera de proyectos, irán primero aquellos que puedan beneficiar a un mayor número de pasajeros.

Con todo, la Administración central asume que «el orden de los trabajos depende de las asignaciones presupuestarias», punto que ha puesto sobre aviso al diputado nacional de Podemos. Segundo González recuerda que la inversión en la red bajó de 11,5 millones de 2012 a los 1,1 del año 2015, recorte al que atribuye que las cercanías de ancho convencional (o Renfe) y las de métrico (las asociadas a la extinta Feve) perdieran un 40 y un 52% de clientela. El diputado de la formación morada quería conocer el orden de los trabajos a ejecutar y la respuesta le ha dejado frustrado.

«Los últimos presupuestos contemplaban una partida de menos del 5% de lo incluido en todo el Plan de Cercanías y lo que se deduce de esta respuesta es que ni siquiera se está ejecutando», indica. Llegado ya septiembre, con el debate sobre las próximas cuentas en boga, Podemos considera «urgente que para 2019 haya un impulso inversor que permita avanzar en el Plan de Cercanías para mejorar frecuencias». El diputado nacional considera que «la transición ecológica supone también impulsar el transporte más ecológicos, como es el caso del ferrocarril».

A la espera de que el ministerio concrete las inversiones, hay una que venía incluida en el plan y empezará a materializarse a partir del 19 de noviembre. Para ese día Renfe está organizando un cambio de la cartelera de cercanías, incorporando catorce nuevas frecuencias entre Oviedo y Avilés, indican fuentes del sector. Los refuerzos asegurarán que tiempo máximo de espera entre tren y tren quede en media hora, además de ofrecer un servicio nocturno que permita a quienes vienen de Madrid en el último Alvia disponer de conexión con Avilés. El dispositivo tiene un coste anual de 1,74 millones para Renfe.