

Secciones
Servicios
Destacamos
TERRY BASTERRA / JUAN GARCÍA
Lunes, 26 de enero 2015, 00:22
La Agencia Estatal de Meteorología había emitido el pasado jueves, y también, el viernes sendos avisos alertando de que existía un riesgo fuerte de que se produjesen aludes en los tres macizos de los Picos de Europa y la previsión se ha cumplido. Prueba de ello ha sido la carretera CA-1, que conecta las localidades cabraliegas de Poncebos, Tielve y Sotres. Allí, especialmente en el tramo que discurre entre estos dos últimos pueblos, se han producido numerosos aludes durante estos dos días que han obligado a interrumpir el tráfico, aunque ninguno de ellos afectó a las personas.
El corte de vía más importante tuvo lugar en la tarde de ayer. Cerca de cuatro horas estuvo la CA-1 cortada a causa de la cantidad de nieve acumulada en la vía tras dos nuevos desprendimiento. El primero de estos aludes se registró sobre las 16 horas de la tarde y pasadas las 18 horas la máquina quitanieves pudo despejar la calzada. Pero inmediatamente después, y unos metros más abajo, se produjo un nuevo alud, este segundo acompañado además de piedras, que dificultó aún más la labor de la máquina quitanieves y mantuvo cerca de otras dos horas más bloqueados a numerosos vehículos. En un primer momento eran una decena, pero con el paso del tiempo llegaron a acumularse cerca de medio centenar. Incluso una parte de las personas que permanecieron atrapadas durante este tiempo ayudó con palas en las tareas de retirada de las cerca de 500 toneladas de nieve que se estiman que podían estar bloqueando la carretera.
Y es que fueron muchos los que se acercaron durante el sábado y el domingo a Sotres a disfrutar de la nieve, tal y como indicaban desde el Hotel Restaurante Sotres. En este negocio añadían que los aludes habían sido una constante durante todo el fin de semana y que habían obligado a cortar la carretera en varias ocasiones en ambas jornadas. «Han subido algo las temperaturas, incluso ha lloviznado, lo que ha favorecido a que haya estos aludes», señalaban en la tarde de ayer desde este establecimiento.
Jéssica López, de la Quesería Main y una de las personas que se vio atrapada en la carretera, recordaban la necesidad de que se coloquen viseras antialudes en esta carretera. «Esto es un peligro. Esta mañana había un matrimonio con un niño pequeño en uno de los lugares donde caen los aludes. Con colocar tres de estas viseras en tres sitios concretos estos problemas se solucionarían», aseguraba. Y es que en Sotres, y en el concejo de Cabrales, son muchos los que temen que hasta que un día un alud no cause una desgracia humana la Administración regional no va a tomar cartas en el asunto y construir estas estructuras que tanto demanda la población cabraliega.
El sentir es idéntico en el Ayuntamiento. «Reclamamos todos los años sin éxito las viseras antialudes. Lo más preocupante no es que la carretera haya estado cortada varias horas. Es que un día un alud le coja a una persona o a coche y tengamos una desgracia», advertía el regidor Carlos Puente, de Foro Asturias.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Pillado en la A-1 drogado, con un arma y con más de 39.000 euros
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.