Un viaje al pasado de Ribadedeva

Lo que empezó hace 15 años como un entretenimiento con el que saciar sus ansias por conocer más sobre su concejo ha culminado en una obra de carácter a caballo entre lo periodístico y lo enciclopédico. Ayer se presentó en el contexto de la VIII Feria de Indianos el libro 'Ribadedeva a la vista del Eco de los Valles', un volumen de 427 páginas al que el actual alcalde, Jesús Bordás Vargas, le ha dedicado década y media de trabajo. Se trata de una obra que permite entrar en profundidad en una parte de la historia de este municipio, la que discurre entre los años 1900 y 1936. Y lo hace a través de los artículos que la publicación el Eco de los Valles dedicó a cubrir la información de Ribadedeva durante este periodo, el mismo tiempo en el que se editó este periódico con sede en Panes.

En las páginas de este libro fundamental para todo aquel que quiera saber más sobre la Ribadedeva del primer tercio del siglo XX se recogen las informaciones y fotografías relevantes de aquella época. Pero no sólo eso. También otros aspectos útiles para la sociedad del concejo en aquellos tiempos como quiénes eran los quintos de cada año, la racha del equipo de fútbol local, los resultados en los torneos de bolos, la temporada de baños en la playa de La Franca, el censo del municipio, la visita del arqueólogo Hugo Obermaier a la cueva del Pindal o las personas que llevaron el ramo en las diferentes fiestas de los pueblos del concejo. Todas ellas informaciones que, además de servir para conocer la historia del municipio, tienen un importante valor sentimental ya que los protagonistas de aquellos artículos son los antepasados de los ribadedenses de hoy en día.

«Cada capítulo recoge un año. Lo titulo con lo que más me llamó la atención de ese año y hago un resumen de lo más destacado, para luego recoger los artículos originales del Eco de los Valles que cuentan hechos relevantes. También anuncios llamativos de aquella época», explica el alcalde y autor de esta obra recopilatoria, Jesús Bordás, quien añade que «personalmente lo que más me ha llamado la atención al repasar estos artículos no han sido las grandes obras o historias de aquellos años, de las que ya tenía conocimiento porque han llegado hasta nuestros días, sino las anécdotas o detalles». Algo que le ha permitido tener un conocimiento aún mayor de la tierra a la que tanto ama.

En cuanto a su método de trabajo, Bordás recuerda que «hace 15 años me enteré de la existencia de este semanario y de que su hemeroteca estaba guardada en el Oriente de Asturias y en el Archivo de Indianos. Comencé a ir cuando tenía tiempo libre y fui investigando y recopilando la información que luego utilizaba para artículos en el libro de las fiestas o en el Oriente. Ya cuando salí elegido alcalde me di cuenta que a todo ese material que había recogido durante años se le podía dar la forma de un libro porque la información ya la tenía».

Recuerdo a José F. Tarno

El objetivo que se ha marcado el alcalde con esta obra está claro: «Busco acercar la historia de Ribadedeva a los vecinos y a quien tenga interés. Que tengan acceso a esa información. Sólo espero que disfruten tanto leyéndolo como lo he hecho yo repasando la hemeroteca del Eco de los Valles».

Y es que para Bordás estos 15 años que ha dedicado a bucear en los ejemplares de aquella publicación que tenía como ámbito geográfico el Oriente asturiano y el Occidente cántabro han sido un verdadero placer. «Descubrir el Eco de los Valles fue maravilloso y cuanto más descubría más quería saber. Esta publicación ha sido para mí como una máquina del tiempo que me ha permitido asomarme a una ventana por la que ver cómo era Ribadedeva entre 1900 y 1936. Este libro que ha sido resultado de todo ese trabajo es un tesoro informativo para este ayuntamiento, pero también una de las mejores experiencias de mi vida». De hecho el alcalde ha querido mantener la esencia de aquellos artículos y los ha recogido tal cual se publicaron, sin variar su vocabulario o gramática pese a que algunos de los usos lingüísticos de entonces no se mantienen en la actualidad.

El autor de 'Ribadedeva a la vista del Eco de los Valles' también tuvo palabras de agradecimiento y cariño para José F. Tarno, un indiano peñamellerano que tras su regreso de América puso en marcha la publicación que ha servido como fuente informativa. «El director del Eco de los Valles pasó de ser para mí un gran desconocido a ser casi como de mi familia. Llegué a establecer un sentimiento afectivo hacia él», confesaba.

El Eco de los Valles se publicó entre 1900 y 1936 y desapareció de una semana para otra con el inicio de la Guerra Civil. La obra que recoge los principales artículos que aquella publicación dedicó a Ribadedeva puede adquirirse por 15 euros en el propio Ayuntamiento local o en la Casa de Cultura del concejo.

De presentar el libro se encargó otro ribadedense, Íñigo Noriega Gómez, director de EL COMERCIO, quien recalcó el «gran valor documental» de la obra y profundizó en la labor realizada por Jesús Bordás. «Trabajar con los periódicos antiguos es una experiencia singular. Una hemeroteca es una fuente de historia», valoró. Y añadió que en aquella época, sin televisión y con la radio aún en una fase muy inicial, «la capacidad informativa del Eco de los Valles era espectacular» para los municipios del Oriente asturiano y el Occidente de Cantabria. Noriega también quiso destacar el trabajo hecho por Bordás. «No es muy común que un alcalde estudie la historia de su pueblo y eso es algo que hay que resaltar».