Francia confirma que el cuerpo hallado en sus costas es el de la llanisca desaparecida en enero

El cuerpo que aparecía en la costa francesa hace menos de dos semanas es el de la mujer desaparecida a finales de enero en Llanes. La Gendarmería confirmaba ayer a la Guardia Civil que, tras haber realizado diferentes análisis y entre ellos pruebas odontológicas, se ha podido identificar a María Encarnación G. C. El cadáver se encuentra ahora en el Hospital Universitario de Burdeos a la espera de su repatriación, que ya ha sido solicitada por las autoridades y posteriormente autorizada.

El cuerpo de la fallecida fue hallado en la playa francesa de Soustons y, en un primer momento, se barajó la posibilidad de que pudiera tratarse de algún desaparecido del propio país. Tras constatar que no se había registrado ninguna denuncia por desaparición de personas con las características que presentaba, se dio parte a la Guardia Civil para iniciar una investigación más amplia y conseguir determinar su identidad. Y es que hace algunas semanas también el mar arrastraba hasta la costa de Francia otro cuerpo que se baraja que pueda ser el de otro desaparecido en Llanes, concretamente en los bufones de Pría. Las pruebas de ADN, remitidas a Madrid, aún no han dado resultados para saber si realmente se trataba de Ismael Rodríguez de la Vega.

Su hijo la echó de menos

A María Encarnación G. C, de 78 años, se le perdía la pista en el paseo de San Pedro de Llanes. La Guardia Civil tuvo conocimiento de la desaparición sobre las 22 horas del 29 de enero cuando su hijo, que solía pasar los fines de semana con ella, dio aviso al cuartel de Llanes de que no la había encontrado al llegar a casa. Los agentes se pusieron en contacto con la Policía Local que informó de que, durante la mañana del viernes, habían encontrado una bolsa con sus objetos personales en el paseo de San Pedro, entre ellos una linterna, por lo que no se descarta que la mujer se pudiese haber precipitado al mar desde ese lugar ya en la misma noche del jueves.

La propia Guardia Civil, el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias y Salvamento Marítimo participaron en el espectacular operativo de búsqueda en la costa llanisca para tratar de hallar a esta vecina. Tres helicópteros se turnaron para rastrear los acantilados y playas del entorno de la villa, apoyados desde tierra por cuatro patrullas de la Benemérita. El fuerte oleaje de aquellos días entorpeció las labores y el rastreo.