Centenares de romeros acuden al Cristo del Amparo en Nueva

A mediodía, la banda de música de San Martín del Rey Aurelio, bajo la batuta de José Félix Ordiz Montañés, recorrió la arteria central del pueblo en pasacalles y escoltada por un elevado número de mozos y mozas de porruano y llanisca. La misa solemne contó con la colaboración vocal del coro Manín, de Lastres, dirigido por Faustino Martínez.

Tras la eucaristía se formó una procesión que se movió por toda la localidad en recorrido circular y tardó más de una hora en regresar a la ermita. Abría la comitiva el grupo de gaitas Principado y el estandarte parroquial de San Jorge en manos de Benigno Fernández. Seguían cuatro ramos de rosquillas y pan artesanal. Un enjambre de rapaces llevaban, por turnos, los ramos de benjamines y alevines: Oliver Alonso, Pablo Gutiérrez, Mateo Álvarez, Carlos Ardisana, Efrén Bernaldo de Quirós, Manuel Cuanda, Martín Peral, Juan Noval, Álvaro González, Ángel Ardisana, Aarón Gutiérrez, Martín Fernández y Alejandro Suárez. El de los veteranos iba a hombros de Jorge Fernández, Pablo Pedrayes, Benjamín Gonzalo y Jaime Blanco.

Seguían más de dos centenares de niñas y mozas vestidas de llanisca, cantando y tañendo incansables sus panderetas durante el largo trayecto. Por detrás aparecían tres decenas de personas vestidas con el blanco batín de mortaja, en cumplimiento de alguna promesa o para agradecer los favores recibidos.

Seguidamente, esplendorosas y rodeadas por fieles y devotos, se hacían visibles las andas con la imponente imagen del Cristo del Amparo, crucificado y sobre un tupido manto de claveles rojos. Los siete sacerdotes, encabezados por el párroco Domingo González; el alcalde de Nueva, Lucio Carriles, la banda de música y un incalculable número de personas, cerraban el cortejo camino de la capilla del siglo XVIII. Al llegar la imagen a la explanada de la ermita, el coro Manín interpretó la pieza 'Perdona a tu pueblo, señor', obra de los compositores Velado y Alcalde. Y no faltó el tradicional lanzamiento de morteros y cohetes de muy grueso calibre.

A continuación, acompañados a la gaita por el poíco Manolín Vela y al tambor por el peñamellerano Gregorio Trespalacios, los jóvenes simpatizantes de la fiesta ofrecieron un completo festival folclórico y bailaron el Quirosanu, las jotas del Cuera, Boal, Leitariegos y Cadavedo, La Flor, la Jotina Asturiana, el Xiringüelu de Naves y el Pericote.