Las clasificaciones del suelo centran las aportaciones al plan general de Llanes

Fue la concejala delegada de Urbanismo, Marián García de la Llana (Foro), la encargada de desgranar las diferentes aportaciones con que se encontraron los redactores del documento una vez finalizado el plazo. En total fueron 290 alegaciones, de las que más de un tercio fueron efectuadas por particulares y estaban relacionadas con la clasificación del suelo. «Son más de 120 e inciden en la inclusión de fincas en suelo urbano o urbanizable, algunas de ellas vinculadas a algún tipo de planeamiento de los que actualmente están anulados», señaló la concejala, y su compañero de gobierno, el popular Juan Carlos Armas, apuntó que «este tipo de aportaciones son más propias de otra fase del proceso, la de la aprobación inicial». No obstante, indicaron desde el gobierno, todas ellas serán tenidas en cuenta a la hora de elaborar el documento inicial, el cual confían tener listo «antes de fin de año».

Por otra parte, De la Llana indicó que «el PSOE fue quien más alegaciones presentó, un total de 71 escritos, pero con muy pocas aportaciones de interés». Muchas de ellas están relacionadas, agregó, con planes parciales ya ejecutados, «reproducen hasta catorce informes del arquitecto y el secretario municipal sobre del documento de prioridades» y presentan cuestiones «que no corresponden a esta fase del proceso». Se recibió también una aportación del Colegio de Arquitectos que, indicó, está relacionada con el plan anulado por el cuatripartito en 2015.

La Asociación de Vecinos y Amigos de Llanes (Avall) presentó, asimismo, numerosas aportaciones. «En general señalan problemas que han detectado y aportan alguna solución, como demanda de suelo productivo, déficit de aparcamientos, gestión de residuos...», relató la concejala de Urbanismo. Del mismo modo, las juntas ganaderas solicitaron que se regule la normativa de uso y certificación agropecuario en suelo no urbanizable, «todo aquello que influye en la construcción de naves ganaderas», e insisten en el mantenimiento de la actividad ganadera en las cuadras existentes y piden la limitación de transformarlas para usos terciarios.

Además HC pide infraestructuras en varios núcleos que precisan de una mejora en la red eléctrica.

Existen también alegaciones de particulares, pero con intereses generales, apartado en el que se incluyen las realizadas por los mediadores y alcaldes de barrio y «ponen sobre la mesa necesidades como protección de las playas, regulación de usos turísticos, estudios tipológicos de los núcleos rurales...», enumeró la concejala. Llaman la atención, agregó, seis alegaciones de particulares contrarias a los objetivos marcados por el documento de prioridades. «Estas personas no están de acuerdo con la protección del paisaje o el desarrollo del sector primario y piden el derecho de los propietarios del suelo a edificar, así como que se incorporen medidas para favorecer la industria familiar vinculada al turismo, todo esto en el entorno rural», explicó.