La CUOTA paraliza el nuevo acceso a la playa de Guadamía desde Ribadesella

Según explicó la regidora, la CUOTA «sorprendentemente ha echado para atrás nuestro proyecto porque, según nos dice, ya existe otro acceso a la playa y no hace falta el nuestro». Ese acceso es el que está ubicado en el vecino concejo de Llanes, concretamente en la localidad de Llames de Pría. «No tiene sentido alguno que nos paralicen esta inversión que iba a llegar a Ribadesella, así que estamos mirando cómo podemos alegar esta resolución para que se tenga en cuenta que Ribadesella no tiene acceso a la playa y por lógica debe tenerlo, ya que los vecinos del concejo están bajando en unas condiciones inapropiadas», añadió Fernández.

El Ayuntamiento de Ribadesella adquirió en su momento la finca colindante a la línea de playa por donde transcurre el camino de acceso al arenal para proceder a la mejora de sus condiciones. Por aquel entonces se redactó un proyecto que fue modificado para cumplir con las exigencias medioambientales del Principado. Ante las trabas burocráticas, el Consistorio dejó su tramitación en manos de Demarcación de Costas, que logró el visto bueno de la Consejería de Medio Ambiente. Pero ahora, la CUOTA lo rechaza a pesar de que el proyecto es «muy respetuoso» con el medio ambiente. La actuación incluía unos travesaños de madera, una pequeña área recreativa y una pasarela final de acceso a la playa para salvar las rocas con total seguridad. «Está claro que estamos jugando en otra liga, que no se nos tiene respeto alguno», lamentó la regidora.

Sobre el acceso a la playa de Arra, desaparecido en junio de 2007, Charo Fernández, reclamó «una intervención mínima que permita que la gente pueda bajar sin problemas, no una inversión desorbitada como se planteó en su día». La Dirección General de Costas descartó su reconstrucción en abril de 2015 debido a que los 300.000 euros presupuestados en el proyecto inicial se dispararon por encima del millón de euros ante la inestabilidad del acantilado. «Lo que necesitamos es un acceso por otro lado con una inversión mucho más pequeña, pero desde Oviedo y Madrid no se ven las cosas como las vemos nosotros», lamentó la alcaldesa de Ribadesella.

Los vecinos de Collera y Meluerda llevan más de diez años reclamando esa solución para evitar el tener que abrir todos los años unos pasos por donde bajar a un pedral del que siempre han disfrutado, unos para darse los correspondientes baños estivales y otros para practicar la pesca deportiva o el marisqueo profesional.