Los destrozos y la basura llegan a los Picos de Europa
En el refugio de Jou de los Cabrones aparece una ventana rota, mientras que en los Lagos un guía se topó con latas y botellas tiradas
G. POMARADA
CANGAS DE ONÍS.
Sábado, 23 de abril 2022, 02:01
Carece de toda lógica visitar un parque nacional de la belleza de los Picos Europa para acabar provocando daños en sus instalaciones o en la naturaleza. Sin embargo, sucede y la prueba se ha vivido en los últimos días en dos enclaves emblemáticos del espacio protegido. En los Lagos de Covadonga apareció esta semana una importante cantidad de latas, botellas y papel de aluminio tirados entre la nieve. Fue un guía de montaña de Cangas de Onís que este miércoles se encontraba en la zona del mirador de Entrelagos quien se topó con la acumulación de residuos y, para llamar a la reflexión, decidió compartir la foto en el perfil de Asturias Vertical. Si bien se desconoce el motivo por el que se acumuló basura, el guía que tomó la instantánea, que también remitió al Parque Nacional, cree que no se trata de los restos de un botellón.
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Los incidentes han llegado asimismo a otro punto emblemático de los Picos, el refugio de Jou de los Cabrones. Allí apareció rota una de las ventanas de la instalación, situada a 2.034 metros de altitud. El guarda, Jorge González, indica que «entraron y cogieron cuatro cosas de comida», pero ningún material de valor. «No tenemos explicación de qué pasó», apunta el guarda, quien considera un «sinsentido» lo ocurrido. A pesar de que la guardería aún no está en el refugio, en la instalación siempre está abierta una puerta para los montañeros que precisen resguardarse.
En caso de haberse tratado de una necesidad, González considera que los responsables deberían haber avisado de la rotura de la ventana, cuya reparación supone un trastorno. «Hay que subir y taparlo y luego poner el cristal», explica sobre la tarea, que se complica tanto por la altitud como por la nieve. Este último incidente no es el único que se ha registrado en un refugio, donde «todos los años hay algún percance», detalla González. «Gente mala la hay abajo y arriba en la montaña», asume.
Al desconocer por el momento la autoría y los detalles de lo sucedido, rechazan culpabilizar a colectivos concretos. Desde el refugio han lanzado un llamamiento para que los responsables se pongan en contacto con ellos con el fin de obtener una explicación.
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