Flores y velas a distancia para la Santina

En Covadonga la llama de la esperanza sigue prendida pese al confinamiento y el cierre del santuario. La distancia no es impedimento para buscar alivio en una de las tradiciones más extendidas entre asturianos y visitantes: pedir a la Santina mediante ofrendas. A ello contribuye la estrategia de la 'marca Covadonga' de digitalizar el Real Sitio con herramientas como la colocación de velas y ramos a través de pedidos online. La iniciativa, concebida para aquellos devotos que viven fuera de Asturias, dio sus primeros pasos en febrero y, tras perfeccionarse en las dos últimas semanas, ha vivido una puesta de largo marcada por la crisis del coronavirus.

En estos primeros días del estado de alarma, en la entrada a la Santa Cueva las velas muestran mensajes de esperanza, como «que todo salga bien», pero también de súplica: «Santina, cuida de mi familia». «Hay mucha gente a quien le reconforta poner una vela, la relación con la Santina es muy especial», explica Juan Stové, director de la marca. Para realizar esas ofrendas, explica, basta con adquirir la vela o las flores en la página de la tienda, indicando el mensaje que debe acompañar a la ofrenda. A continuación, se pone en marcha un servicio gratuito por el cual uno de los trabajadores se encarga de depositarlas y tomar una fotografía que se envía al usuario. «De momento va bien y nos gratifica», apunta Stové.

Al servicio se suman más iniciativas puestas en marcha en el Santuario en los últimos años y que están adquiriendo pleno sentido durante la cuarentena. «En la web tenemos pinchada la señal para ver las misas y sí se nota que hay más usuarios», detalla.