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Luis Fernández Martín inaugura hoy su exposición en Llanes. E. C.
Luis Fernández expone sus acuarelas asturianas en Llanes

Luis Fernández expone sus acuarelas asturianas en Llanes

Es la primera vez que el pintor, especializado en paisajes realistas, muestra su obra en la región

L. R.

LLANES.

Martes, 20 de agosto 2019, 00:08

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Empezó a pintar con apenas diez años y ya nunca lo dejó. El ovetense Luis Fernández Martín tiene en su haber decenas y decenas de cuadros que fue creando a lo largo de su vida y en los que predominan los paisajes realistas. Su aprendizaje, relata, fue «completamente autodidacta», por lo que durante su vida laboral aprovechaba cualquier hueco que las obligaciones empresariales le dejaban para ir puliendo su técnica. «Tuve periodos de mayor y menor actividad, en función de mi trabajo», explica.

Y es que, tras sus estudios en la Escuela Superior de Comercio de Madrid, la vida le llevó por diferentes países, sin abandonar nunca, eso sí, el pincel. Fue precisamente en una de sus estancias en el extranjero, concretamente en Estados Unidos, cuando expuso por primera vez alguna de sus obras en el marco de una muestra colectiva. Corría el año 1973 y a esta exposición le seguirían muchas más en Ohio (Estados Unidos), Madrid, México, Menorca, Guadalajara, Palma de Mallorca, Toledo, Ciudad Real e incluso la red virtual.

«Durante mi última exposición, el año pasado en Madrid, una persona se interesó por el hecho de que Asturias aparezca en muchas de mis acuarelas, a lo que respondí que soy asturiano y llevo a mi tierrina en el corazón», indica el artista. Y relata cómo así se fue fraguando la posibilidad de exponer por primera vez en el Principado, decantándose finalmente por la Casa de Cultura de Llanes, donde esta misma tarde, a las cinco y media, inaugurará la muesta 'Mi Asturias realista'.

Solo dos de los veinticinco cuadros que componen la exposición representan paisajes de fuera de la región, uno de Cantabria y otro de la playa de las Catedrales, en Ribadeo. «El resto son todo estampas asturianas, sobre todo del Oriente», apunta. Y explica cómo desde su jubilación, hace unos treinta años, pinta con una mayor asiduidad. «Sigo pintando porque me divierte y si encima mi pintura gusta, mientras Dios me dé vista y pulso, seguiré», asevera, mientras aguarda, ilusionado, el veredicto de los llaniscos.

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