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G. POMARADA
LUCES (COLUNGA).
Jueves, 26 de septiembre 2019, 00:15
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Con aplicaciones como biofertilizantes, cosméticos naturales y en alimentación tanto humana como animal, el de las microalgas es un campo repleto de oportunidades que los alumnos de Formación Profesional del IES de Luces se encargarán de explorar durante los próximos tres meses. Para ello, el centro público se ha aliado con la empresa Neoalgae, radicada en Gijón y con siete años de experiencia en el cultivo de estos microorganismos fotosintéticos que, por primera vez, entran en las aulas asturianas. «No se había hecho nada así, solo en universidades de otras comunidades, como Andalucía», explicaron los responsables de la iniciativa, presentes ayer en Luces para informar a los alumnos que formarán parte de la experiencia, medio centenar del ciclo de grado medio de Producción Agroecológica y del recién implantado superior de Ganadería y Asistencia en Sanidad Animal. «Más que de I+D, este es un proyecto formativo», indicó Ignacio Albert, director de Neoalgae.
Dada la vinculación de los estudios que se imparten en Luces con la agroganadería, los esfuerzos del trimestre se centrarán precisamente en aplicaciones acordes a través de la espirulina, un alga «todoterreno» considerada como un «súper alimento» por la OMS, pero empleada también como cosmético, fertilizante o incluso en una investigación frente a tumores, explicaron. «Aquí vamos a ver su capacidad depurativa y qué hacer con la biomasa resultante. Las microalgas utilizan los purines como fuente de alimentación y así se puede obtener un agua limpia que se utilice, por ejemplo, para el riego», apuntó Albert. Para ello, los estudiantes serán partícipes de todo el proceso, desde la instalación de los sistemas de 'raceway' -una especie de tanques- al posterior cosechado, toma de muestras y análisis. «Se seleccionarán los porcentajes de purines para cultivar microalgas y se tomarán las medidas para ver cuál es el más idóneo», detalló David Suárez, director técnico de la empresa que ejercerá como profesor en estos meses.
«No va a ser algo etéreo», prometieron desde la compañía gijonesa, que completará la formación con sesiones en su planta de producción del polígono de Lloreda y visitas a la conservera que poseen en Luanco, así como a una empresa de Tineo que fabrica tanques y sistemas 'raceway'. Los alumnos de grado medio se especializarán en la parte del cultivo, mientras que los futuros técnicos superiores abordarán tanto ese aspecto como el de análisis, una oportunidad además para ampliar sus horizontes laborales. «Encontramos poca gente para trabajar, por eso nos parecía interesante formar a personas en esta materia», apuntó el director de Neoalgae, que cuenta actualmente con dieciséis empleados. El proyecto formativo está coordinado por la profesora y jefa de estos, Marisol Martínez, y se enmarca en el programa de innovación aplicada de la Consejería de Educación.
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