Nacho abre tres días después la cuenta de bebés en el oriente

Tres días después de iniciar el año, el oriente recibe a su primer bebé de 2023. Es riosellano de empadronamiento, se llama Nacho y se trata del segundo hijo de una joven pareja muy deportiva, la presidenta de la SCD Ribadesella, la arquitecta Ángela Tejo, y el atleta perteneciente a este veterano club, Juanjo García.

Nacho García Tejo vino al mundo en el Hospital Grande Covián de Arriondas a las 19.06 horas del martes 3 de enero con un peso de 3,5 kilos, 50 centímetros y tras un parto natural. «Fue todo muy rápido, estuvimos muy bien atendidos y tanto la madre como el crío están geniales», indicó el padre. El nuevo bebé se incorpora a una familia cuya primogénita es Marina, una niña que el 25 de enero próximo cumplirá dos años y que aún no ha conocido a su primer hermano. Lo hará en cuanto hoy reciban el alta hospitalaria.

Además, la casualidad quiso que Nacho llegase al mundo el mismo día que su padre. «Fue el mejor regalo de cumpleaños de mi vida. El mismo día en el que cumplía 40 años nacía Nacho, así que estamos encantados. No pude soplar las velas, pero no pasa nada. Cuando salgamos del hospital lo celebraremos como es debido y a partir de ahora a compartir tarta todos los años», añadió Juanjo García.

La madre de la criatura, Ángela Tejo, estaba encantada con la forma en la que se desarrolló el parto. «Todo fue a pedir de boca, porque el equipo que hay aquí es una gozada. Con el primer parto todo fue increíble y este fue espectacular», aseguró. En diciembre, antes de la San Silvestre, bromeaban con la posibilidad de que el niño se adelantase, impidiendo la participación del padre en la carrera y, al final, en lugar de ser el último de 2022 fue el primero de 2023. No obstante, «se adelantó un poquitín», ya que el parto estaba previsto para el 10 de enero. «Al final dejó a su padre correr la San Silvestre, pero nada más, quiso ser el primero».

Y no ha sido el último, porque en el Hospital de Arriondas también se escuchaban ayer por la mañana los llantos de una niña nacida en la madrugada del miércoles 4 de enero. La maternidad del Grande Covián se ha animado así durante tras ser la del oriente la última área sanitaria en iniciar la cuenta de bebés, una demora que ya se ha registrado más años.

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