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JUAN GARCÍA
RIBADESELLA.
Jueves, 1 de enero 1970
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La riosellana playa de Vega está siendo sometida a un acicalado general. La Universidad de Oviedo, a través del proyecto europeo Arcos Life, está desarrollando una serie de actuaciones de regeneración ambiental en este arenal para la conservación y protección de su sistema dunar, único en el Oriente de Asturias. El proyecto se está desarrollando en diez ecosistemas similares de la cornisa Cantábrica, distribuidos entre País Vasco, con seis; Cantabria, con tres; y Asturias, con otros tres. En nuestra comunidad se está actuando, además de en Ribadesella, en las playas de Verdicio y Carriciega, en el concejo de Gozón, y en Barayo, en Valdés.
Según explicó Carlos Ley Vega de Seoane, director de Ecología Litoral S.L, empresa que ejecuta el proyecto, en la playa de Vega se está actuando en tres diferentes frentes. En primer lugar, se protege el sistema dunar «contra el pisoteo, contra el impacto del turismo indiscriminado». En segundo lugar, los trabajos pasan por eliminar las especies invasoras. Y por último, se plantan especies propias de estos ecosistemas dunares.
La protección de las dunas se realiza mediante la instalación de cerramientos de postes de madera y malla metálica «que nos aseguran que el turista no pise las plantas, porque está demostrado que el turismo de los últimos treinta años es una de las principales causas de la desaparición de los sistemas dunares», explicó Carlos Ley.
En la eliminación de plantas invasoras, hasta la fecha se han encontrado con pitósporos, capuchinas o grama americana. «Nos está dando muchos problemas porque tiene una densidad bastante grande», añadió el responsable de la empresa. Por suerte, en la playa de Vega no se han encontrado con el plumero de la pampa, extendido por buena parte de la región.
En una tercera fase, la repoblación del sistema dunar de Vega se realizará con especies autóctonas procedentes del vivero de plantas dunares que el Ministerio para la Transición Ecológica tiene en Cantabria. Entre esas especies destacan el barrón, la grama marina, la azucena marina, el cardo marino o la arenaria de mar -esta última en peligro de extinción- plantas que son las más comunes en estas latitudes y que aportan mayor fijación para la arena.
El proyecto se mantendrá activo hasta el próximo mes de junio de 2019, ya que este tipo de trabajos requieren de una labor lenta y minuciosa, «porque la retirada de las plantas invasoras suele ser un trabajo a largo plazo que además requeriría de un mantenimiento cuando nosotros nos marchemos». De momento se está actuando a «pequeña escala» con un único operario que trabaja en la playa, cuya labor se verá reforzada cuando sea necesario. La playa de Vega, junto al Desfiladero de Entrepeñes, está catalogada como Monumento Natural por el Gobierno del Principado de Asturias, al tratarse de uno de los pocos arenales con dunas de la región.
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