El Principado cobró hasta 6.700 euros de más a familiares de usuarios del ERA

«Todavía no hemos empezado a pagar», reconoció ayer Pilar Varela, quien apuntó que hay otras 229 familias a las que «se les ha informado de que la factura será menor». Pese a que, en total, son 2.802 los casos detectados, la consejera de Servicios y Derechos Sociales considera que el montante total «no superará los cuatro millones, en lugar de los seis que habíamos previsto inicialmente».

La polémica de las facturas del ERA comenzó con la protesta de familias a las que llegaban facturas de hasta 90.000 euros por el uso de unas plazas que sus parientes ya habían pagado con su pensión. En el último año, tras una ley votada unánimemente en la Junta, el Principado ha puesto en marcha un decreto para examinar todos los expedientes y devolver o recortar las cuantías.

Algo que no sucederá con las 733 bajas del año pasado, cuyas familias deben pagar porque lo aportado no cubre el gasto total. Así lo confirmó Pilar Varela durante la presentación de la memoria del ERA, realizada en el pabellón que el Principado tiene en la Feria Internacional de Muestras de Asturias (Fidma). Acompañada de la directora del organismo, Graciela Blanco, ambas señalaron el importante incremento de la demanda. «El año pasado recibimos 3.484 peticiones, que suponen un 5,6% más que el año pasado, pero un 25% más respecto al anterior».

Un volumen de peticiones que se traduce en una lista de espera «de más de 1.300 personas». Pese a la cifra, Blanco aseguró que «no se puede hablar de lista de espera como tal, porque si no hay petición de una residencia en concreto, el plazo medio de respuesta es de un mes. Diferente es a si se quiere una residencia de Gijón o de Oviedo, como la Santa Teresa, en pleno centro».