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Viernes, 23 de mayo 2025, 14:22
El sector ecológico tiene la media de edad más baja dentro del conjunto del sector primario asturiano. Esto se debe a su modelo productivo, basado en los principios de la agroecología y en los canales cortos de distribución.
Un enfoque que permite la viabilidad económica de los proyectos y facilita el arraigo de los jóvenes en las zonas rurales. Además, muchos de ellos eligen la producción ecológica por ser un sistema más respetuoso con el medio ambiente, del que se obtienen alimentos saludables y libres de los productos químicos, habitualmente usados en la agricultura convencional no ecológica.
En Asturias, no dejan de surgir nuevos proyectos de producción ecológica que apuestan por renovar el campo asturiano, combinando tradición y modernidad. Esa es la esencia de este tipo de producción, que ya permite el sustento de cientos de familias vinculadas al sector primario en la comunidad autónoma.
Uno de los pilares de la producción ecológica es precisamente fomentar los circuitos cortos de distribución y priorizar las producciones locales dentro de los territorios de la Unión Europea. Este principio básico permite que los productores puedan comercializar sus productos en su entorno más próximo, obteniendo así un precio justo al eliminar intermediarios y los elevados costes asociados a la comercialización fuera de sus regiones.
El modelo ecológico genera un impacto positivo no solo en la economía de las explotaciones, sino también en la vida social y cultural del medio rural. Al facilitar que los jóvenes puedan emprender en su propio territorio, se frena el despoblamiento rural, se revalorizan saberes tradicionales y se impulsa un modo de vida conectado con la tierra y el entorno natural.
Garantía de los productos ecológicos de Asturias
Los alimentos ecológicos producidos en Asturias están controlados por el Consejo de la Producción Agraria Ecológica del Principado de Asturias (COPAE). Este organismo se encarga de certificar que los alimentos asturianos con el distintivo de la «Eurohoja» cumplen con la estricta normativa europea sobre producción ecológica. Dichos controles garantizan que no se han utilizado productos químicos como herbicidas, pesticidas o abonos sintéticos en ninguna fase del proceso productivo, y que no se han empleado Organismos Modificados Genéticamente (OMG), ni siquiera en la alimentación del ganado.
Además, la normativa ecológica es el reglamento oficial más exigente en materia de bienestar animal dentro de la Unión Europea. Las explotaciones ganaderas ecológicas deben garantizar una amplia superficie de terreno para cada animal, el acceso a pastos al aire libre, la alimentación con piensos ecológicos, la no utilización de antibióticos ni otros medicamentos de manera preventiva y sin prescripción veterinaria y, en general, una cría extensiva que respete sus ritmos y necesidades naturales.
Apostar por los alimentos ecológicos de Asturias es apostar por el futuro del mundo rural asturiano. Pero también significa elegir una alimentación más saludable y respetuosa con el medio ambiente. Cuando compramos un producto certificado con el sello de la Eurohoja, estamos contribuyendo a que las próximas generaciones del campo puedan mantener sus formas de vida, en un modelo que combina la tradición con las oportunidades que ofrece el presente.
El sello ecológico no solo garantiza calidad, salud y sostenibilidad, sino también el compromiso de cientos de profesionales que trabajan cada día con dedicación y responsabilidad para ofrecernos alimentos que cuidan de las personas y del entorno.
Por eso, cada vez que elegimos ecológico, estamos apoyando una red local de productores que luchan por mantener vivo nuestro campo.
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