Dos profesores se jubilan cada día lectivo en Asturias

Y la situación solo puede empeorar. En estos momentos la plantilla docente del sistema público ocupa a unos 11.300 profesores, de los que 4.000 son interinos. Pues bien, un tercio de esa plantilla (o quizás algo más) se sitúa en la franja de edad entre 50 y 60 años. Eso supone unos 4.000 docentes que se encuentran ya en la recta final de su vida laboral. «Hay que intentar mitigar esta situación», advierte Borja Llorente, de CC OO. Porque ésta, unida a las limitaciones que ha habido durante años para las convocatorias públicas de empleo, ha provocado que las oposiciones no hayan logrado, ni de lejos, cubrir las jubilaciones y que las tasas de interinidad no desciendan. Al contrario, alcanzan en estos momentos casi el 34%, porcentaje aún más preocupante, señala Llorente, si se tiene en cuenta que uno de cada tres de esos interinos tiene un contrato de media jornada.

Hace años que la situación se agrava. Especialmente, desde 2012, cuando la Ley de Mantenimiento del Sector Público marcó la tasa de reposición cero, es decir, se prohibieron las nuevas convocatorias de empleo público. Después se fueron aprobando, pero por debajo del 100% durante muchos ejercicios. El último informe detallado que existe respecto a la situación del profesorado en la comunidad es el Informe del Sistema de Educación de Asturias, elaborado por el Consejo Escolar del Principado y que corresponde al curso 2014-2015. La cifra de docentes en la red pública era entonces de 11.153 (algo menos que en el curso actual), pero los tramos de edad ya eran similares. Y ya en aquel curso un 35,3% de los docentes tenía entre 50 y 59 años. En concreto, 3.938. Otras 3.390 tenían entre 40 y 49. Incluso había 519 de entre 60 y 65 años y se contabilizaban 70 de más de 65 años. Hay que tener en cuenta que los profesionales que tengan plaza anterior a 2011 se podrán jubilar con 60 años. Los de después continuarán hasta los 67.

En toda España, según un informe del mismo sindicato, presentado a principios de este año y titulado '¿Cuánto trabaja el profesorado? Mitos y verdades', se señalaba que el 37% de los docentes españoles tienen más de 50 años y que 70.000 se jubilarán en los próximos cinco años. Por eso, CC OO reclamaba rejuvenecer las plantillas y mantener las jubilaciones anticipadas.

Por otra parte, en Asturias los sindicatos han pedido la rebaja del horario lectivo para los profesores mayores de 55 años y compensarlo con actividades complementarias. Por el momento, Asturias y algunas otras comunidades no lo han aceptado. UGT, Suatea y ANPE, por ejemplo, apuntan esta cuestión como uno de los compromisos incumplidos por el actual equipo de la Consejería de Educación.

Mientras, el Principado tiene autorización para una tasa de reposición del 105%, esto es, para convocar más plazas de las que en ese momento se han quedado vacantes, para empezar a recuperar todo lo perdido anteriormente. «Pero ni siquiera eso es suficiente», advierte Llorente. El próximo mes, miles de aspirantes se 'jugarán' las 725 plazas convocadas este año al cuerpo de maestros.

Y así, entre unas cosas y otras, lo dicho, la tasa de interinidad está en el 34%. Para este curso, la Consejería de Educación convocó la mayor cifra de la historia, con 3.156 plazas, previstas ya en agosto, antes del inicio del curso. Después llegó la segunda gran convocatoria que tiene lugar siempre, la de finales de setiembre, y se alcanzaron ya los 3.700 puestos de interinos. Y a eso se van sumando los constantes llamamientos que hay durante el curso. Total, unos 4.000 profesores sin plaza fija ejerciendo.

Algunos, desde hace muchos años, ya que hay especialidades de Secundaria y FP, por ejemplo, que no se convocan desde hace años. Para Latín, por ejemplo, no hay desde hace décadas. Por tanto, se da la circunstancia de que hay interinos próximos a la jubilación. «En las listas hay jubilados y muertos», añade el portavoz de CC OO. Las situaciones de interinidad, han reiterado los sindicatos una y otra vez, afectan especialmente a la zona rural y las alas. De ahí que se haya pedido de forma reiterada un plan de estabilización de plantillas para esas áreas, entre otras cosas. Borja Llorente pone un ejemplo. El colegio público Jovellanos de Panes tiene 200 alumnos y un claustro con 20 profesores: el director, que es funcionario, y 19 interinos. «Imagine el mes de septiembre en ese colegio». Un caos. Si algún curso el director pide traslado, o una excedencia por cualquier motivo, «no habría nadie ni para abrir la puerta, tendrían que dejar en funciones a alguien de la plantilla del año anterior».