Salud prepara un plan para reforzar la plantilla de Primaria antes del verano

El Servicio de Salud del Principado (Sespa) trabaja en un plan para reforzar los recursos humanos de la red de Atención Primaria. No se dispone «de momento» de médicos suficientes para cubrir las jubilaciones previstas, pero se potenciarán las plantillas de los centros de salud «a nivel de otras categorías profesionales» para liberar de tarea a los facultativos y que «puedan así dedicarse realmente a la atención clínica».

En definitiva: «Reforzaremos los equipos de Atención Primaria para darle apoyo a los médicos de familia y quitarles carga de trabajo», resume la gerente del Sespa, Concepción Saavedra. Se hará dentro de una estrategia integral, compuesta por 53 acciones y 115 propuestas, que actualmente está siendo supervisada por el Ministerio de Sanidad. La idea es que este plan de recursos humanos cuente con fondos europeos y se pueda poner en marcha ya de cara al verano.

«Cualquier situación de baja o unas vacaciones nos desequilibran y debemos tomar medidas», admite el Sespa. Durante el verano pasado, el colapso de los centros de salud fue monumental, situación que se repitió en las últimas navidades. En ambos casos, el período vacacional coincidió con un repunte del coronavirus que fue la gota que colmó el vaso. El malestar de los profesionales sanitarios llegó hasta tal extremo que incluso recogieron firmas para solicitar la reprobación parlamentaria del consejero de Salud.

Hay centros de Primaria en los que faltan hasta tres facultativos por baja o jubilación. El número de residentes en Medicina de Familia y Comunitaria, aunque se ha duplicado, todavía no alcanza para cubrir esos vacíos que sobrecargan de trabajo al resto de la plantilla. Y el Sespa no niega las dificultades para fichar profesionales de fuera de la región. Así que la solución a corto plazo, se puede decir que inmediata, será «reforzar mucho las unidades de apoyo».

¿Y cómo? Pues ampliando la plantilla de matronas -«va a haber casi una por centro»-, de profesionales de la salud bucodental y de psicólogos, «porque dan muy buen resultado para que los pacientes no tengan que llegar a la consulta de Psiquiatría». También crecerá el número de auxiliares administrativos -«todavía más»- y de trabajadores sociales. «El trabajo social nos parece muy importante. Consideramos que la crisis sanitaria ha traido consigo mucha desigualdad y problemas que requieren de una mayor presencia de estos profesionales», explica Saavedra.

En parte, esos problemas sociales acababan recayendo en la consulta del médico de familia, que se viene haciendo cargo de un sinfín de tareas administrativas ajenas a la atención clínica. «Vamos a ampliar el ratio de trabajadores sociales por habitante», anuncia el Sespa, cuyo plan de recursos humanos abarca también el servicio de fisioterapia. El Sespa tiene previsto «aumentar la plantilla de fisios para que se pueda trabajar mañana y tarde».

Se toma esta decisión ante la demora generada durante la pandemia en un servicio como éste que «es muy presencial». El Servicio de Salud del Principado pretende poner en marcha «una especie de plan de choque» para «recuperar toda esa patología» que se ha ido acumulando durante la crisis sanitaria y está pendiente de atender. Hay pacientes a los que se ha tardado hasta nueve meses en dar cita para un tratamiento de Fisioterapia, una de las especialidades que arrastran una mayor lista de espera.

Los responsables de la sanidad pública asturiana se han ido reuniendo con los gerentes de las ocho áreas sanitarias del Principado para valorar las necesidades de personal existentes en cada una de ellas. «También con los médicos residentes que finalizan su formación este año», afirma el Sespa, que necesita conocer los planes de futuro de esta nueva hornada de facultativos para «ir organizando la temporada de verano».

Este año completarán su especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria 33 facultativos. En 2023, lo harán 42. Y en el ejercicio siguiente serán 62. En los últimos dos años, el Principado ha pasado de invertir 29,7 millones de euros en la formación de residentes -de todas las especialidades- a los 39 asignados actualmente. Según el Sespa, esta inyección presupuestaria, de 10 millones más, da fe de que Asturias está avanzando en la generación de especialistas. No obstante, solo en Atención Primaria, se jubilarán 73 médicos a lo largo de 2022; y el año que viene, 87.

Aun se está trabajando en cuáles son las necesidades de personal de cada área sanitaria y centro de salud, que se concretarán «en cuanto hagamos la valoración presupuestaria correspondiente» y el Ministerio de Sanidad valide la propuesta del Principado para reforzar Atención Primaria. El Servicio de Salud del Principado cuentan con poder poner sobre la mesa los números de su plan de recursos humanos entre mayo y junio. «Tenemos que reforzar Primaria para el verano», se marcan como horizonte los responsables de la sanidad pública asturiana.

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