El equipo de gobierno de Siero renuncia al parque canino en La Rienda

Las obras, con un plazo de ejecución de un mes, fueron adjudicadas a principios de julio, por lo que deberían estar ya concluidas, pero las máquinas nunca llegaron a entrar al terreno y el equipo de gobierno confirmó ayer que ha renunciado a la construcción. «Desistimos de hacer el parque canino en el lugar donde se había hablado y se va a pensar en otra ubicación que no genere tanto rechazo vecinal», argumentan fuentes municipales.

Una oposición que llegó al Ayuntamiento de forma paralela al proceso de contratación. El pasado mes de julio, varios residentes solicitaron por escrito la paralización de las obras al entender que se habían producido diversas irregularidades. En concreto, defendían que el expediente no había estado sujeto a información pública, que los colindantes con el futuro parque no habían sido notificados y que el proyecto afectaba a terceros. A la petición se sumó el grupo municipal de IU que, además, advirtió de la existencia de sentencias favorables a los vecinos en casos similares.

Sin embargo, un informe técnico de la jefa de Disciplina Urbanística y Medio Ambiente determinó posteriormente que la tramitación había sido correcta tanto desde el punto de vista de la calificación urbanística como de los trámites efectuados y que «no existe causa de legalidad que pudiera justificar una suspensión de la obra».

Por otro lado, según ha podido saber este periódico, el administrador de la empresa adjudicataria presentó la pasada semana un escrito en el registro municipal en el que señala que desconoce las causas por las que las obras están paralizadas y pide una solución. Asimismo, recuerda que llegó a trasladar la maquinaria a la zona y añade que ha tenido que retirarla «con el consiguiente perjuicio que esta situación nos ha causado en cuanto al tiempo empleado y con el agravante de haber realizado el pedido de materiales necesarios para la obra».