La escuela asturiana de drones

La Escuela Europea de Maquinaria Roxu, ubicada en el polígono sierense de Granda, forma desde hace casi tres años a los futuros pilotos de drones, más conocidos como la 'Drone Division'. Una iniciativa de la que la empresa es pionera en el Principado.

El objetivo del curso, que tiene una duración de ochenta horas, es otorgar la destreza a los alumnos para pilotar los aparatos dentro del ámbito industrial. El responsable técnico de la división de drones, Iván Álvarez, destacó que el trabajo fundamental de los drones es «prevenir»: «Una de las cosas que nos permiten los drones hoy en día es no poner en peligro la vida de las personas, haciéndolas llegar a sitios inaccesibles».

A la visita a las instalaciones acudió el vicepresidente del Principado, Juan Cofiño, quien destacó la iniciativa de Grúas Roxu: «Es importante que se apueste por la formación y por la innovación. El proyecto ya se está exportando al resto de España y eso significa que el esfuerzo ha sido mayúsculo». Por su parte, el fundador de la empresa, José Manuel García, incidió en la importancia que tiene que los jóvenes se formen para desarrollar las actividades laborales del futuro: «Es vital que cuenten con la mejor preparación».