La Escuela de Minas advierte del «quebranto económico y de tiempo» que supone su traslado a Mieres

Aparte de necesitar «mayor concreción», ven «serios problemas en la propuesta» de su traslado a minas. Entre ellos, «el gran quebranto económico y de tiempo que pueden sufrir los estudiantes y sus familias. De salir adelante -apunta-, no solo afectaría a los alumnos actuales, sino también a los futuros interesados en cursar nuestras titulaciones». Esto es, cree que desincentivará las matriculaciones «al generarse incertidumbres innecesarias».

Asimismo, expresa su «preocupación por el enorme impacto económico que puede generar» la reordenación de campus y de sedes de titulaciones. «Se tendrá que abordar con fondos que se dedicarán a mover seis infraestructuras de prestigio ya existentes y no a mejorar la calidad de los estudios y la investigación». Fondos, subraya, «que saldrán de los bolsillos de las asturianas y asturianos».

Da más argumentos. Insiste en los mismos que trasladó ayer al alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, con el que está «en plena sintonía» para frenar el traslado. «Se perdería una marca internacional (Escuela de Minas de Oviedo) y de prestigio asociada a la ciudad».

Y vuelve a lamentar, como hizo ayer también, la 'guerra' de años entre Oviedo y Mieres por los estudios de Minas. «Reviviemos innecesariamente una situación desagradable de división y enfrentamiento tanto en el plano institucional como en el social. Aparecen de nuevo los localismos. Se vuelve a incidir en un tema ya zanjado en su momento y es una situación que en nada nos beneficia a los asturianos, puesto que todos deberíamos estar unidos en esta región para llevarla a la posición que le corresponde».