Se entrega a la Policía el hombre atrincherado en su vivienda tras amenazar a su pareja en un restaurante de Avilés

El hombre que se había atrincherado en una vivienda de Coto Carcedo, en Castrillón, tras insultar y amenazar gravemente a su pareja en un establecimiento hostelero del centro de Avilés, se ha entregado finalmente a la Policía. La víctima fue trasladada al Hospital Universitario San Agustín para ser atendida de un fuerte ataque de ansiedad, mientras que el presunto autor huyó del lugar y se atrincheró en una vivienda de Coto Carcedo. Ante la llegada de la Guardia Civil, según fuentes policiales pidió la presencia de un negociador en un primer momento, visiblemente nervioso. En la zona también se había desplegado la Policía Local de Castrillón y efectivos de la Policía Nacional de Avilés. Se trata de un piso en la última planta de un inmueble de tres alturas, aunque no ha sido desalojado. Al final, ha sido detenido tras ser convencido por el negociador para que depusiese su actitud.

Según testigos presenciales, la pareja se encontraba comiendo en el interior del restaurante junto a los dos hijos adolescentes de él, un niño y una niña, y otro niño menor que es hijo de la mujer, en ambos casos de relaciones anteriores. Dos horas después de haberse iniciado la comida, los mismos testigos aseguran que comenzó una bronca entre ambos, con insultos del hombre hacia su pareja. El nivel de los improperios no pasó desapercibido para los clientes del conocido restaurante. Uno de ellos, de avanzada edad, llegó incluso a afearle su conducta, algo que no gustó al hombre, que le ofreció pegarle a él en la calle.

En un momento de la discusión con su pareja, el hombre le habría quitado el bolso con las llaves del coche y de la vivienda y se habría marchado del restaurante en compañía de sus dos hijos amenazando con quemar la casa y pegarse un tiro. La mujer no quiso salir en su búsqueda víctima de un ataque de pánico, llegando a asegurar que si salía el hombre la mataría. Fue atendida de un ataque de ansiedad y conducida al Hospital Universitario San Agustín. Se desconoce el origen de la disputa, aunque la causa podría ser una denuncia judicial por violencia de género.