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R. A.
AVILÉS.
Jueves, 1 de enero 1970
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La iglesia de Santo Tomás de Cantorbery comienza a prepararse para afrontar la rehabilitación de su fachada, necesaria desde hace tiempo y evidenciada el pasado mes de mayo, cuando la caída de unos cascotes obligó a la parroquia a realizar un análisis de los paramentos exteriores que descubrió que, a pesar de que no presentaba problemas estructurales, si tenía daños que convenía reparar.
Los trabajos se realizarán a corto plazo, por lo que ya han comenzado a darse los pasos necesarios para llevarlos a cabo, y así un equipo de la empresa Dogram Ingeniería de Documentación Tridimensional pasó ayer la mañana realizando mediciones y tomando fotografías del exterior del templo para calcular a partir de ahí los andamios que será necesario instalar cuando se lleve a cabo la obra.
El Ayuntamiento había emitido un informe instando a la parroquia a reparar la fachada «bajo la dirección de un técnico competente y previa presentación de la documentación técnica necesaria». Los arreglos urgentes se llevaron a cabo de forma casi inmediata. Pocos días después del incidente de los cascotes, la parroquia llevó a cabo una inspección de sus cuatro fachadas con una grúa. Se revisó no solo la fachada principal, sino también los laterales y la parte posterior, aprovechando para sanear las paredes sellando grietas y retirando hierbajos. En aquellos días se llevó también a cabo una limpieza de los canalones.
La rehabilitación será ahora más completa, y se espera contar con un técnico de prestigio, dada la importancia del templo.
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