La Policía se incautó de más de quinientas dosis de droga en la vivienda registrada en Luis Bayón

La Policía Nacional se incautó de más de quinientas dosis de estupefacientes, oro, dinero, material tecnológico, navajas y un puño americano en el registro el miércoles de una vivienda del polígono de La Magdalena. En concreto en el registro del piso se encontraron 440 dosis de cocaína y cerca de 125 de heroína preparadas ya para su venta.

Con esta intervención se da por desarticulado este punto de venta de droga en uno de los bloques de viviendas de la calle Luis Bayón. Tres de los detenidos pasarán hoy a disposición judicial, mientras que la cuarta, una de las mujeres, fue puesta en libertad con cargos el mismo miércoles.

La investigación comenzó después de que los vecinos alertaran de un mayor movimiento de venta de droga en este conocido punto, según la Jefatura Superior de Policía de Asturias como consecuencia de una mayor presión policial sobre otras zonas. Las pesquisas condujeron a la identificación de estas cuatro personas y el punto de distribución de la mercancía, que coincidía con su vivienda.

Dadas las «elevadas medidas de seguridad» de los detenidos, entre otros motivos porque dos de los ellos acumulaban ya varias detenciones por hechos similares, los agentes del grupo de Unidad de Prevención y Reacción (UPR) que accedieron en primer lugar lo hicieron «por la fuerza». La Policía Nacional informó ayer de que, debido a esta resistencia y por las heridas provocadas a dos de sus agentes, a los detenidos se les imputa un delito de atentado contra agente de la autoridad, además del de tenencia y tráfico de droga.

Será el juzgado de guardia el que determine hoy si las evidencias y pruebas recopiladas por la policía tienen suficiente entidad como para acusar a los detenidos de algún delito. Su abogada Judith Gómez Álvarez tiene sus dudas porque, en su opinión, «esta operación se ha magnificado» dado que sus clientes son principalmente «personas consumidoras».

Antes de conocer el número de dosis encontradas, aventuró que sería para «autoconsumo» y también que «las cantidades de dinero encontradas fueron muy mínimas». Cree que se empleó una «fuerza desproporcionada» para entrar en el domicilio, habida cuenta que había dos niños de dos y tres años en el domicilio.

Explicó que en esa vivienda vive una pareja joven, a la que en ese momento estaban visitando los padres de él, que traían a uno de los niños del dentista. La Policía Nacional, sin embargo, matiza en la nota de prensa enviada ayer sobre la operación, que «los dos matrimonios regentaban el piso», dando a entender que, aparte de domicilio, la vivienda era un negocio.

No es la primera vez que se interviene en esta calle por el mismo motivo. El año pasado por estas mismas fechas se llevó a cabo una intervención similar en la que se incautaron de 450 dosis de cocaína y heroína, dinero en metálico, útiles para la manipulación de la droga, varias armas prohibidas, joyas y un vehículo de alta gama. En un registro domiciliario fueron hallados relojes de oro, gran cantidad de cosméticos y perfumes de alto coste, la mayoría sin desembalar, así como ropa, calzado y complementos de grandes firmas, aún con las etiquetas puestas.

Los detenidos vivían supuestamente del salario social, aunque su nivel de vida no correspondía con tales ingresos.

Tanto entonces como ahora, las investigaciones comenzaron por las quejas vecinales. Tal como los vecinos aseguraron el miércoles a este periódico, «no se cortan. Hablan a gritos y se lanzan la droga y el dinero».