El Principado reclama una solución para la depuradora de Maqua

La Consejería de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático ha incluido la necesidad de modernizar la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Maqua entre sus alegaciones al Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Cantábrico Occidental y que actualmente se tramita. Desde la administración regional se recuerda al Ministerio de Transición Ecológica que la inversión en Maqua es necesaria para cumplir con la Directiva 91/271 de la Unión Europea.

Por su parte, el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico mantiene que la modernización de la depuradora de Maqua figura entre las actuaciones recogidas en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el próximo año.

El anteproyecto se encuentra redactado con un presupuesto de 39,8 millones de euros y actualmente se encuentra en fase previa a su licitación. Para la Dirección General del Agua, se trata de una intervención «prioritaria» que se impulsará con los diez millones de euros que los Presupuestos Generales del Estado destina para el próximo año a Asturias. «Al ser una inversión plurianual, existe suficiente margen para iniciar el proyecto», defiende.

La inversión representará en la práctica la construcción de una nueva depuradora. Una vez que la EDAR de Maqua comenzó a funcionar se descubrió que el contenido salino del agua era superior al previsto. La principal consecuencia era que no se alcanzaban los niveles de depuración previstos y se generan malos olores. También ha afectado a la propia estructura de los edificios, con una mayor corrosión de la cúpula que no se había previsto inicialmente por lo que será sustituida.

A ello se une que la zona ha pasado ser definida como «normal» en vez de «menos sensible», lo que obliga a una mayor calidad en los vertidos de aguas residuales según los criterios de la Unión Europea.

Además, la administración del estado ha iniciado los estudios para desafectar los terrenos donde se encuentra la actual EDAR de Maqua para que pasen a ser patrimonio del Estado y pierdan la condición de Dominio Público Marítimo Terrestre que actualmente tienen.

De forma paralela, se trabaja en un proyecto para la restauración ambiental de los terrenos con una inversión de 1,5 millones de euros.