El retraso de una licencia deja sin prácticas a 150 alumnos de soldadura y calderería
El Ayuntamiento exige al CIFP Avilés una chimenea para colocar una nueva máquina de extracción que filtra las impurezas más de un 99% y está homologada para interior
Matricularse en un ciclo de Formación Profesional para aprender soldadura, calderería, mecanizados o construcciones metálicas y no poder aprender en las clases prácticas. Es la paradoja en la que viven desde el inicio de curso los aproximadamente 150 alumnos de ciclos relacionados con el sector del metal en el Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) de Avilés. Y esta vez no es por culpa de la falta de inversiones del Principado, sino por el retraso en la concesión de una licencia de obra por parte del Ayuntamiento para instalar un nuevo sistema de extracción en un taller.
Técnicos del gobierno regional emitieron un informe en julio pasado según el cual se obligaba a alumnos y profesores a abstenerse de hacer prácticas de soldadura y calderería en las mismas condiciones en las que se había hecho siempre en el centro formativo de referencia del sector del metal en la región. El motivo era la inexistencia de un sistema de extracción y filtrado de gases libres de impurezas.
Se trata de un taller compartido por varios ciclos formativos. En total, unos 150 alumnos afectados, que lamentan ahora, en noviembre, «que nadie nos dijera al matricularnos que no íbamos a poder hacer prácticas en el inicio del curso».
«Hemos perdido ya un trimestre, si nos hubiesen avisado al matricularnos hubiésemos ido a otros centros», lamentan los alumnos de los ciclos
Quizás la dirección del centro no informó de esa posibilidad porque no se contemplaba al haber una inversión aprobada de alrededor de 48.000 euros para una nueva máquina. Tras el informe del mes de julio, se hicieron consultas a varias empresas para la instalación del sistema de extracción que cumpliese los requisitos. La elegida fue Lincoln Electric, un referente en el sector que tiene varias instalaciones en centros formativos públicos y privados de Asturias, en los que no se encontró con el problema que mantiene paralizada la obra en el CIFP Avilés.
El problema se ha enquistado en el Ayuntamiento de Avilés, que ha puesto objeciones para la ejecución de la obra y retrasa la concesión de la correspondiente licencia. Según ha podido saber este periódico, hay diferencia de criterios sobre los requisitos de este tipo de instalaciones. Desde el área se servicios técnicos del Ayuntamiento se exige la construcción de una chimenea que sobrepase la cubierta del edificio, y que además siga la estética del mismo y de los edificios de la zona, es decir, que esté recubierta de ladrillo.
Los servicios técnicos municipales han hecho un requerimiento al CIFP y al Principado «y se está pendiente de que subsanen documentación». Desde el punto de vista del centro, la dirección aseguraba ayer que técnicos del gobierno regional y del Ayuntamiento han mantenido reuniones para encajar las exigencias municipales con las características de la instalación. La empresa adjudicataria defiende, por su parte, que se trata de una máquina homologada para su funcionamiento en interiores y no necesita estructuras complementarias, ya que se filtran gases e impurezas provenientes de la actividad de soldadura y calderería en un porcentaje superior al 99%.
Según al citada homologación, esa máquina extractora ni siquiera habría que instalarla en el exterior del centro formativo. Pero en este caso se ha decidido su colocación fuera del taller al tratarse de una instalación formativa en la que se quiere minimizar al máximo las molestias del ruido que pueden generar este tipo de máquinas, «pero nunca por la calidad del aire». La empresa ofrecerá a los servicios técnicos municipales información al detalle sobre la eficacia del equipo y sus características de filtración.
En cualquier caso, está proyectado que la máquina se instale en el exterior del taller. Además, como complemento de la actuación, la empresa y la dirección del CIFP Avilés también habían decidido proteger la instalación, bien con una nueva estructura o aprovechando alguna de las dependencias ya existentes.
Este tipo de máquinas, en versiones anteriores y más modernas, se instalan frecuentemente en empresas privadas con talleres de grandes dimensiones en su interior, sin ninguna obra complementaria como exige el Ayuntamiento de Avilés, según defiende la empresa. En el caso de centros formativos, también hay máquinas similares en instalaciones repartidas por Asturias y en organizaciones como Femetal o el centro de formación ocupacional del Servicio Público de Empleo en Avilés.
En el caso de que se desbloquee la licencia en el Ayuntamiento, los plazos se acortarían. En primer lugar, se encargaría la fabricación del equipo, y a continuación se procedería a su instalación. Esta última fase se podría hacer en un plazo aproximado de una semana. Desde la dirección del CIFP Avilés no se dio ayer una fecha, pero sí se expresó optimismo en que haya un acuerdo rápido entre técnicos del Principado y el Ayuntamiento.
Posible huelga
Mientras, tanto alumnos como profesores se mantienen expectantes y preocupados ante un retraso que afecta a la calidad de su formación, pero también al prestigio de un centro de Formación Profesional que es un referente en el sector del metal en una comarca de gran peso industrial como la avilesina y también en el conjunto de la región.
El primer trimestre del curso 2023-2024 se da por perdido, pero en la comunidad educativa ya empieza a temerse que comience el segundo trimestre sin poder utilizar el taller. «Cuando me matriculé, nadie me advirtió de que no íbamos a tener prácticas en el inicio del curso. Hace un mes comenzaron a comentar que no íbamos a poder hacer esto en el taller», aseguraba ayer a este periódico una alumna.
Es más, en algunos grupos está tomando forma la idea de convocar una huelga para exigir la reapertura del taller. Según ha podido saber este periódico, alumnos del turno de mañana del grado medio de soldadura y calderería se están planteando convocar un paro que podría ser durante toda la jornada lectiva, o en aquellas horas en las que deberían hacer prácticas en el taller y de momento no pueden hacerlo.