La salud domina el paseo de la ría

La lluvia dio tregua para que ambos pudieran plasmar sus firmas sobre la piedra. Ambos aseguraron dejarla con «cariño» y con la promesa de «ser siempre embajadores de la ciudad». A media mañana paseaban desde El Parche hasta los monolitos, pasando por la pasarela y el puente de San Sebastián, dos de los lugares más icónicos de Avilés.

«Es una sensación muy extraña, uno nunca hubiera pensado que terminaría en un paseo de Avilés. Siento mucha responsabilidad, esto supone un compromiso con la ciudad y voy a ser un embajador de ella», recalcaba Alberto Pérez Mediavilla. El investigador estuvo rodeado de familiares y amigos, pero aseguró que volvería, ya que «Avilés es ahora un punto de referencia para mi y también para mi familia».

Mientras ambos procedían a destapar sus firmas paseaban por la zona varias personas, de diferentes edades. Unos caminando o otros corriendo, un aspecto que no les fue ajeno a los premiados. «Pensar que cuando la gente corra por aquí dentro de cincuenta años verán mi firma me enorgullece», decía emocionado el médico y jugador de baloncesto Juan Antonio Corbalán.

Sabino González, presidente de la Cofradía del Colesterol, encabezó la delegación que acompañó a los dos galardonados ayer por la mañana antes de que se despidieran de la ciudad tras varios día de actos. «Son dos premiados de lujo, no solamente por sus conocimientos científicos y del deporte sino por su personalidad como 'paisanos' como decimos en Asturias», destacaba.

Alberto Pérez Mediavilla lanzaba a la vez un mensaje claro sobre la necesidad de más espacios como el paseo de la ría avilesina. «Esta zona tiene una pinta muy saludable. Se puede venir a correr, andar o a socializar, sobre todo las personas mayores. Los hábitos saludables son algo que cada uno debe ejercitar, pero las ciudades también tienen que ayudar a ello», resaltaba el biólogo experto en la enfermedad de alzheimer, que añadía que «además, las personas que gobiernan, en este caso los ayuntamientos, tienen que desarrollar políticas en esta dirección. Es algo que se dice, pero que en realidad no se hace. Hay que hacer ver a las personas con esta responsabilidad que invertir en inculcar hábitos saludables a la población es ahorrar mucho dinero porque es un manera muy eficaz de prevenir enfermedades».

El biólogo, por último, insistió en que «el ser humano es un ser social por naturaleza y necesitamos conectarnos con otros. La parte fisiológica que actúa en ese momento es el cerebro por lo que es una práctica que es muy buena para evitar lesiones que le afecten».

Una idea que también lanzó Juan Antonio Corbalán, que añadía frente a su monolito que «la medicina, los hábitos de vida y la actividad física son dos vías fantásticas para mantener la salud, buscar la felicidad y para, de alguna manera, cohesionar a los jóvenes y a la sociedad en una cosa que parece imparable que es la práctica del deporte».

Corbalán se marchaba de la ría reiterando que «me hace mucha ilusión, es muy bonito que te reconozcan por una trayectoria que tiene que ver tanto con tu antigua profesión, que fue la de jugador de baloncesto, como con la 'nueva' de médico». Con este acto quedan convocados los XX Premios HDL Colesterol Bueno para el próximo año. Una cifra redonda que la Cofradía del Colesterol quiere celebrar de una forma especial.