El temporal derriba árboles y daña mobiliario urbano en Avilés

Fue una noche larga para los vecinos de la comarca avilesina y para los servicios de emergencia. El fuerte viento volvió a causar estragos en los cascos urbanos y las carreteras secundarias del extrarradio. Uno de los incidentes más aparatosos se registró al principio de la noche de ayer miércoles en el parque de Ferrera. Un árbol de grandes dimensiones se precipitaba sobre una de las calles de mayor tránsito peatonal del principal pulmón verde de Avilés. A escasos metros del acceso desde la avenida de Cervantes, el paso quedaba cortado y ahora se espera a que los servicios municipales retiren toda la leña acumulada en el suelo.

El Parque de Ferrera quedó cerrado ayer miércoles a las 20.25 horas y así permanecerá hasta que mejoren las condiciones meteorológicas y se proceda a su revisión por personal de parques y jardines. Del mismo modo, se encuentran cerrados (acordonados con cinta) los accesos al resto de parques de la ciudad.

En cuanto al resto de incidencias más destacadas por el temporal de lluvia y viento en las que ha intervenido la Policía Local de Avilés hasta las 7 de la mañana de hoy jueves, destacan la caída por vuelco de un tilo en el paseo central del parque de El Muelle (con diecisiete metros de altura y 160 centímetros de perímetro), además de otro ejemplar por rotura desde la base en el parque Ferrera, a la altura del acceso desde la avenida Cervantes (veinticinco metros de altura y 405 centímetros de perímetro).

También se produjo una caída de acacia en la avenida de la Constitución, 4 y permaneció cortada al tráfico desde las 2 de la madrugada hasta las 9.30 horas la carretera AV-1 de acceso al Fondo de Valliniello (a la altura del Área Recreativa) por caída de un árbol ya retirado. Igualmente estuvo cortada al tráfico entre las 8 y las 11 horas la carretera de La Plata por árbol caído en Castrillón, ya retirado.

En el casco urbano de Avilés destacan la caída de una ventana sobre un vehículo en la avenida de Lugo, 133; y de una farola en la calle de Cristóbal Colón en Villalegre, además de desplazamientos y roturas de cortavientos, toldos y diversos elementos de terrazas de hostelería.

Tras la recogida de basura, la mayor parte de los contenedores quedó tumbada por operarios del servicio para evitar su desplazamiento hacia la calzada. Por este motivo, se redujeron los avisos de contenedores desplazados por el viento.

En otras zonas, como en El Quirinal, también cayeron al suelo árboles de pequeño tamaño y el fuerte viento causó daños en el mobiliario público, con bancos rotos y algunos contenedores volcados sobre las aceras.

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