«Se acabó, aunque a veces creo que estoy viviendo un sueño»
La víctima del agresor sexual de Bustiello se muestra aliviada ante la revocación de la suspensión de la pena de tres años de cárcel
ALBERTO SANTOS
AVILÉS.
Sábado, 20 de febrero 2021, 00:59
La mujer de Bustiello que hace tres años sufrió un intento de violación y una paliza por parte de un joven por fin puede respirar tranquila. La Audiencia Provincial de Asturias ha revocado la suspensión de la pena de tres años de prisión dictada en noviembre por el Juzgado Número 2 de lo Penal de Avilés y el condenado deberá entrar en prisión. Es un alivio para ella, pero las cicatrices psicológicas del calvario judicial que ha tenido que pasar en este tiempo aún no se han cerrado.
Visiblemente emocionada tras conocer el nuevo auto judicial, la vecina de Bustiello no olvida el daño que le hizo la resolución anterior del magistrado José Carlos Martín Martín, titular del Juzgado de lo Penal Número 2 de Avilés. Para ella, la corrección que hace la Audiencia Provincial es «un guantazo a mano abierta al Juzgado de Avilés, algo que ya sabíamos, porque no tenía razón de ser ni argumento ninguno para cambiarle como le cambió la condena».
La víctima de la agresión sexual celebra que la resolución de la Audiencia «argumenta por qué ese cambio de condena no venía a cuento de nada y tenía que cumplir lo que tenía que cumplir. Ni siquiera es algo que hubiese hablado con la abogada específicamente, porque vas investigando, leyendo, y no se dan las circunstancias para ese cambio del Juzgado Número 2 de Avilés. No lo entenderé en la vida, porque no había motivación ninguna en ese cambio. El auto de la Audiencia queda claro, ahí sí hay motivación, está explicado por qué no ha lugar y tiene que entrar en la cárcel».
Por ese motivo, su sentimiento ayer era «agridulce. Le ha salido tantas veces la cosa bien, he esperado que esto se terminara y al final siempre daba un giro. Ahora, aunque sé que es lo último, me cuesta alegrarme de verdad, me cuesta en mi mente verle allí metido. Quiero pensar que ya que sí, que anoche mismo -por ayer- ya pasó la noche donde tenía que estar, pero me sigue costando verlo».
El daño psicológico de la suspensión de la pena que ahora revoca la Audiencia Provincial le hace pensar a la víctima que «es un sueño, que me van a venir con otra historia, porque la última del Juzgado de Avilés me machacó muchísimo. Parece que todo está bien, pero vamos a tomárnoslo como que se acabó y sobre todo que la Audiencia me parece que lo ha hecho perfecto».
La Audiencia Provincial de Asturias desmonta el auto judicial del Juzgado Número 2 de lo Penal de Avilés al considerar que «en ningún momento se dice que sufriera dependencia o grave adicción al alcohol o a la cocaína, o que su grado de afectación fuera tal que le hubiera conducido a perpetrar los delitos». También añade en su resolución que tampoco consta que el autor de la agresión sexual se encuentre deshabituado o a tratamiento, «y por ello desde el momento en que únicamente tras el inicio de la presente ejecutoria se ha decidido por interesarse, por incorporarse a un tratamiento de deshabituación, pero cuya incorporación no se ha hecho efectiva, con lo que su ingreso en prisión no interrumpiría el tratamiento iniciado ya en libertad, que es lo que se pretende evitar con esa modalidad de suspensión de la pena». Además, concluye que «si el penado quiere deshabituarse nada impide que lo haga, siguiendo el oportuno tratamiento, en prisión».
La resolución que revoca la suspensión de su entrada asegura que «de todas maneras, aunque tales presupuestos concurrieran, ello no conlleva una concesión automática de la suspensión de la pena». Para los magistrados de la Audiencia, «vistos los hechos dados por probados, revelan una gravedad de tal entidad que entendemos que no hacen al penado merecedor del beneficio de suspensión de la pena».