La banda Un pingüino en mi ascensor invita al jugador del Sporting Jonathan Dubasin a su próximo concierto en Gijón
La banda Un pingüino en mi ascensor anuncia concierto en Gijón con una invitación especial al delantero del Sporting Jonathan Dubasin
A. C. R.
Viernes, 31 de octubre 2025, 10:24
Vive la voz de José Luis Moro –además de en la garganta del susodicho para dar rienda a su ingenio infinito, se entiende– en esa parte del cerebro que recuerda rimas, letras y anuncios televisivos de la infancia o juventud con escalofriante precisión –al menos, para todo aquel que respirase en los ochenta–, pero es incapaz de grabar información relevante para su día a día. Es la misma voz de pop nasal que entona las canciones de Un pingüino en mi ascensor y, por ende, que acompaña a Juan Valdés en el largo camino que le conduce al Aconcagua, que incita a Barbie a subirse a un coche teledirigido robado, que exploró los límites del consentimiento con un bonsai y que esta semana se ha dirigido directamente a un jugador del Real Sporting de Gijón con nombres y apellidos. Y apodo.
El pingüino Dubasin, Jonathan de nacimiento, ha recibido del propio Moro una invitación difícil de rechazar a través de las redes sociales de la banda. Resulta que el grupo toca en Gijón (sala Acapulco) el próximo 22 de noviembre y no ha querido pasar por alto la feliz coincidencia de sobrenombres.
Sus palabras no necesitan de más acotación: «Todo el mundo me conoce como pingüi o el pingüino, vivo rodeado de pingüinos, colecciono pingüinos en una vitrina en forma de pingüino, mires a donde mires en mi casa hay un pingüino, tengo una agencia de publicidad que se llama Pingüino Torreblanca. Vamos, que si hay un pingüino en este país, soy yo. Pero resulta que ahora me entero de que en Gijón hay otro pingüino. Y nada me haría más ilusión que el pingüino de Gijón venga a nuestro concierto. Por eso, desde aquí, quiero invitarle formalmente: Jonathan, de pingüino a pingüino, vente a nuestro concierto, que va a molar. Te ponemos zona VIP o lo que haga falta. Larga vida a los pingüinos». Así sea.