Borrar
Ekain, David, Nina y Paco, cuatro de los cinco miembros de Morgan. Fernanda Carvalho
Morgan: «Esto no es un trabajo, es un juego de niños»

Morgan: «Esto no es un trabajo, es un juego de niños»

La banda de rock y soul, afronta la recta final de su gira antes de tomarse unas merecidas vacaciones del escenario

Iker Cortés

Madrid

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Sábado, 19 de octubre 2019

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

«¡Chicos, venga!», llama Nina. Paco, David y Ekain están tan enfrascados en una conversación sobre la juerga de uno de ellos la noche anterior en el BarCo, uno de los pocos pubs que abre hasta altas horas de la madrugada en la capital madrileña -apuntemos, esta charla tiene lugar un jueves, a las 20:00 horas-, que no han reparado en que la vocalista de Morgan ya está preparada para tomarse las fotos. No será la última vez que una de las voces más sugerentes y electrizantes del panorama musical español tenga que llamar al orden a los tres muchachos.

Los cuatro -falta Alejandro, el bajista- acaban de salir de una entrevista en la radio, se meten a otra y tienen una cena unos minutos más tarde. No hay duda, la banda, que inició su andadura en 2012, vive ahora su momento más dulce, con un fin de gira lleno de fechas y un segundo larga duración, 'Air' (2018), que les ha abierto las puertas al éxito. La banda afronta la recta final de su gira, tras la que se tomarán un merecido descanso del escenario.

-Llevais juntos desde 2012, pero los últimos dos años han sido vertiginosos. ¿Hay tiempo para paladear el éxito?

Paco: Yo creo que eso va en cada uno, más que como banda, pero probablemente no. Sí que sentimos que nos están pasando cosas que no son normales, porque tenemos experiencias con otras bandas pero más que el agradecimiento y disfrutar del momento en el que estamos yo creo que no. No lo sé. A lo mejor se acaba dentro de un año se acaba o dentro de diez y lo vemos con otro ojos.

Nina: No nos hemos parado a analizarlo, pero yo creo que sí que somos conscientes de que lo que nos pasa son cosas increíbles y estamos muy agradecidos e intentando vivirlo lo máximo posible.

-Habéis tenido que ampliar con una fecha vuestro paso por La Riviera en Madrid. ¿Uno piensa ya en el Wizink Center?

Nina: Uhhh.

Paco: No, no pensamos en eso. Pensamos en el próximo partido. Sentimos un gozo absoluto llenando La Riviera, pero no hacemos planes, sería un error por nuestra parte adelantarnos a nada. Se trata, simplemente, de disfrutar de lo que tenemos de aquí a fin de gira, intentar hacer un show lo mejor que seamos capaces y ya está.

-¿Ha cambiado mucho la gira desde que empezó?

Nina: Bueno ha pasado por distintos momentos. Ha sido muy bonito porque al principio presentábamos casi todos los temas del segundo disco, luego hemos pasado por la época de los festivales, que por suerte hemos podido ir a un montón, y hemos acotado un poco el repertorio a esos espacios y ahora, para el fin de gira, haremos como un repaso de todo lo que nos ha pasado. El parón que vamos a hacer para el año que viene va a ser un parón real, así que antes de irnos queremos repasar todo lo que hemos hecho hasta ahora y despedirnos de todo el mundo. O sea que sí, la gira ha ido evolucionando y los temas incluso han ido viviendo cosas que es un poco lo que pasa en los directos.

-Contadme cómo se levantó el grupo. He leído que fue Nina quien se acercó con unas canciones a Paco.

Nina: Bueno, yo fui con las canciones porque él me las pidió (ríe).

Paco: Ya estábamos en una banda juntos y en ese momento musical de compartir conciertos y ensayos, ella nos dijo: «Mira, tengo esto». Y pensé que era muy bueno y como nos gusta empezar proyectos buenos, aunque luego se queden en lo que sea, lo comenté con Ekain. Hicimos una grabación de piano y voz. Nina tenía un billete de avión para irse a Holanda a probar suerte, pero como habíamos dado dos pasitos, le dijimos: «Bueno, espérate, vamos a ver en qué se transforma esto, a ver si grabamos un par de maquetas y un disco… Y así fue».

La banda posa en una céntrica calle de Madrid.
La banda posa en una céntrica calle de Madrid. Fernanda Carvalho

-¿Han cambiado mucho las cosas desde entonces? ¿Sigues siendo tu, Nina, la que compones todas las canciones o es un trabajo más colectivo?

Nina: Hasta ahora el esqueleto sí que ha sido un poco así, pero no es porque hayamos dicho: «Nina, tú te ocupas de esto». Yo llevo las canciones, con la voz y el piano, y luego cada uno aporta. de todas maneras, yo tengo en la cabeza que la canción no empieza a ser canción hasta que no le ponemos cada uno lo que creemos conveniente.

-Las letras son un algo etéreas: hablan de lanzarse a la carretera, de amores perdidos, de protegerse frente al exterior. ¿De dónde surgen esas ideas y en qué momento entra la música?

Nina: La música va antes y luego ya llega la letra, pero cuando doy con una secuencia de acordes ya sé de qué quiero hablar, lo que pasa es que la letra la hago después. Y son vivencias personales. Yo creo que a partir de ahora, como ya he contado todo lo que tenía que contar, vamos a ir relatando otras historias, pero sí que hasta ahora han sido cosas que me han pasado, cosas que he visto, cosas que hemos sentido. En el segundo disco hay letras que yo creo que representan más a los cinco.

-Cada disco tiene una aproximación al castellano con un tema, pero el resto de las canciones son en inglés. ¿Es más difícil escribir en español?

Nina: Cuando a mí me ha salido en inglés, pues tiro en inglés, y cuando me pasa en castellano, pues tiro en castellano. Pero una vez lo tengo claro, no me es más difícil una cosa que la otra, la verdad. Por ejemplo, 'Sargento de hierro' me salió muy rápido y temas como 'Flying Peacefully' me costó mucho más. Simplemente, salen menos. No puedo cocinar si no tengo ingredientes para hacerlo.

-Decíamos antes que lleváis dos o tres años vertiginosos, ¿qué trucos tenéis para no perder la frescura y que no acabe convirtiéndose en un trabajo?

Paco: es que tocar es divertidísimo. Si los temas son buenos y la gente con la que tocas te hace gozar y tu mismo disfrutas de tu propio instrumento, es muy difícil perder la frescura. A veces llegas de bajón porque estás cansado, porque llevas una semana mala o lo que sea y en el momento en que empiezas a tocar es muy difícil que no te vengas arriba porque nos gusta muchísimo tocar. No me imagino ver esta profesión como un trabajo nunca, ni quiero ser un profesional y creo que el resto tampoco. Tener la frescura de cuando empezamos a tocar, cuando teníamos 18 años, es muy fácil porque es como un juego de niños.

Vídeo. Morgan, interpretando 'Home'.

-Hacéis un rock más cercano al folk americano y al soul, son géneros que en España no acaban de despuntar y, sin embargo, vosotros habéis conectado muy bien con el público español. ¿Sabéis cuál ha sido la clave?

Nina: Si la tenemos, no sabemos explicarla ni donde está.

David: La caja de Ekain (ríen).

Nina: Al final del día lo único que queremos es tocar juntos. Eso se está alargando en el tiempo, pero no pensamos nada cuando nos juntamos y no pensamos nada ahora. No sabemos por qué ha venido, ni si se irá mañana, pero si mañana por lo que sea se va, nosotros quedaremos en el local y nos juntaremos para tocar y ya está. Y no tiene nada que ver con géneros y etiquetas. La clave es disfrutar de tocar juntos.

-¿Y es una ventaja o una desventaja no sonar a pop indie español?

Ekain: No pensamos en cómo suenan otras bandas, ni en lo que está sonando. No pensamos en esos términos. Cuando Nina nos presenta una canción vemos hasta dónde nos puede llevar y si nos gusta a nosotros y ya y eso es lo que cuenta.

Paco: Cuando llegó el grunge, el hard rock no dejó de ser bueno. Que se hicieran dos estilos, compartiendo escenarios y salas y festivales, era lo que cada uno sentía y era bueno.

-Pero cuando todo el mundo suena igual, desmarcarse es...

Paco: El secreto es que si lo que haces te sale natural y haces lo que a ti te gusta, ya está, no hay que darle más vueltas. Si es lo que más está sonando en ese momento, bienvenido sea, maravilla, disfrútalo, pásatelo bien, y ojalá vaya bien.

-Hablabais antes de los festivales, ¿qué os parece la escena festivalera? ¿Estamos ante una burbuja?

David: Está bien, pero es obvio que hay una burbuja de festivales porque en cualquier rincón, aldea y comarca hay siete festivales. Siempre ha habido público de festival, pero tan mayoritario como ahora nunca. Es como un plan muy de moda, hay personas a las que no les gusta la música y van a festivales porque es un acto social donde puedes ir a pegarte la juerga padre. Es otro tipo de consumo. Un pack de vacaciones.

Ekain: Y yo pienso que está muy bien y es positivo porque ha habido un mónton de grupos que se dan a conocer a gente nueva por eso mismo. Si tu haces bien tu trabajo, al final eso va calando. Hay gente que no pagaría igual 20 euros por verte en una sala, y salir de ese circuito y formar tu público de salas es ya responsabilidad de cada banda, pero creo que lo que ha pasado en esta última década es muy positivo. De todo esto quedará algo bueno para mucha gente, no sé si estallará, pero quedará algo bueno.

-Y con tantos conciertos, ¿hay tiempo de escribir nuevas canciones?

Nina: Ahora mismo la prioridad es el fin de gira y alguna idea sí que hay. Ahora cuando terminemos la gira, pues estaremos un par de meses filtrando y cogiendo perspectiva para tratar de filtrar un poco todo lo que hemos aprendido y nos meteremos en el local y que salga lo que tenga que salir.

Vídeo. La banda, interpretando 'Sargento de hierro'.

-Ahora tenéis mucho más público, ¿os sentís más presionados?

Nina: Es que el público nos ha dado la libertad para hacer lo que queríamos y es ese público el que está esperando a ver qué hacemos, pero no como presión sino como empujón en plan: «Chavales, meteos ahí y haced lo que queráis hacer». Entonces no es presión. Todo el mundo viene a darnos cariño y a contarnos lo que ha sentido durante el concierto y todo es guay. Luego vienen y me dicen: «Suerte con el tercer disco». Más que presión, son ánimos.

Ekain: Todo lo bueno que nos ha pasado ha sido por haber hecho las cosas que nos han dado la gana y eso nos da una libertad total.

-¿Qué música estáis escuchando ahora que se podría filtrar en un nuevo álbum?

Nina: Yo he estado escuchando estos días Amason, que son suecos. Y estoy enamorada totalmente.

Ekain: he escuchado el último de Wilco. Mola. Es raro, muy tranqui. A mí me ha gustado y no se me ha hecho largo. Me lo pondré por las noches.

Paco: Como el de Beck, ¿no?

Ekain: También lo último de Bon Iver me ha gustado mucho.

Paco: Yo he flipado con un tema en directo de Richard Hawley, la canción 'Ocean'. Es un tema en directo de 7 minutos que me ha encantado, con una melodía de voz muy chula, el canta super guay y están construyendo un momento... Lo habría gozado muchísimo si hubiera estado viéndolo. Y es algo que, por ejemplo, nosotros no hemos experimentado. No hemos entrado en ciertos campos y creo que sería muy divertido hacerlo. Este parón nos va a permitir experimentar… Y hacer un truño de disco (ríe).

Ekain: La diferencia entre el primer y el segundo disco es que para el primero tuvimos mucho tiempo para darle vuelta a las canciones y hay canciones que no nos costó nada, como 'Home', y otras, como 'Work', que sufrieron un montón de transformaciones y al final eso se acaba notando.

Nina: Para el segundo vinieron los refuerzos y salió todo más rápido en parte por eso.

Ekain: Para el tercero queremos que haya un poco de todo.

-Y en un momento en el que todo se consume a velocidades brutales, ¿está la gente preparada para canciones de seis u ocho minutos?

Paco: Tengo demostrado que sí porque la primera canción de nuestros conciertos es de nueve minutos y da la sensación de que están entendiendo lo que queremos decir. Yo tengo muchísima esperanza en la gente, en que si lo hacemos bien le va a gustar.

Ekain: Las versiones de directo de varias canciones duran bastante más.

-Es casi como una jam session.

Paco: sí, pero intentamos que tenga sentido. Da la sensación de que el público disfruta y vuelve. Lo entiende. Mientras sea así, nosotros seguiremos haciéndolo y cuando no sea así nosotros seguiremos haciéndolo pero no vendrá nadie a vernos. Y entonces no vendréis vosotros a hacernos entrevistas… Por favor, que todas esas cosas pasen cuanto antes que esto del éxito me está matando (ríen).

Próximos conciertos

  • 25 de octubre Vitoria, Jimmy Jazz, entradas agotadas.

  • 26 de octubre Zaragoza, sala Oasis.

  • 27 de octubre El Campello, Alicante, Auditorio.

  • 1 de noviembre Festival Bime, en Bilbao.

  • 2 de noviembre Festival Hallowindie, en León.

  • 9 de noviembre Vilalba, Lugo, Auditorio.

  • 10 de noviembre Santiago de Compostela, sala Capitol.

  • 15 de noviembre Cáceres, Gran Teatro.

  • 22 de noviembre Valencia, La Rambleta.

  • 29 de noviembre Córdoba, sala M100.

  • 30 de noviembre Almería, teatro Apolo.

  • 6 de diciembre Valladolid, teatro Carrión.

  • 14 de diciembre Madrid, La Riviera, entradas agotadas.

  • 15 de diciembre Madrid, La Riviera.

  • 20 de diciembre Burgos, Auditorio Forum Evolución.

  • 21 de diciembre Santander, Palacio de Festivales.

  • 27 de diciembre Santaspascuas Festival, Pamplona, Zentral.

  • 30 de diciembre San Sebastián, teatro Victoria Eugenia

  • 10 de enero Granada, Industrial Copera.

  • 11 de enero Murcia, Auditorio Victor Villegas.

  • 18 de enero Sevilla, sala Custom.

  • 25 de enero Barcelona, sala Apolo.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios