«En este punto parece que la vida nos pide hacer algo nuevo»
El grupo lleva más de 35 años en la carretera y el 12 de enero demostrarán que siguen con la misma energía en un concierto en el Teatro Albéniz
Han pasado ya más de 35 años, desde que Los Berrones irrumpieron en la escena musical asturiana y la zarandearon con su 'agrorock'. Muchos no ... se han olvidado todavía de aquello ni de aquel 'Nun yes tú', que ahora corean también los chavales jóvenes que no eran ni siquiera un proyecto cuando ellos ya andaban dando guerra por los garitos. Incluso hay un bar en Gijón que luce un neón en su pared con esa frase que ellos volverán a celebrar el próximo 12 de enero en el Teatro Albéniz. Les toca cerrar gira y lo harán con un fiestón, tal y como promete Olegario Méndez. Ya tiene ganas.
-Están a punto de terminar la gira, ¿con qué sabor de boca se quedan después de tanto tiempo en carretera?
-La verdad es que debemos tener en cuenta que venimos de donde venimos. A veces se nos olvida que en 2020 no se pudo hacer absolutamente nada y que, en 2021, hubo dos o tres cosinas nada más y con muchas restricciones, con todo el mundo separado y con mascarillas. Venimos de una época muy mala, de la peor de nuestra historia porque nunca habíamos estado tanto tiempo sin tocar, entonces las ganas que teníamos eran muy grandes y esas ganas las tenía también la gente. La verdad es que salió incluso mejor de lo que esperábamos porque, después de tanto tiempo, salir al escenario sin ser un grupo juvenil era difícil. Nosotros somos ya veteranos y, a pesar de eso, la gente sigue siendo fiel, incluso chavales que pensábamos que no iban a seguir nuestra estela, pues resulta que se están incorporando. Nos está prestando mucho y, además, no solo estuvimos en Asturias, sino que también tocamos en Cantabria, en Galicia, en León y en Madrid.
-Con lo cual, en este último concierto del Albéniz, tocará una buena fiesta...
-Queremos que sea un fin de fiesta, que vengan los amigos y que venga mucha de la gente que estuvo en otros conciertos. Hay gente que, si damos doce conciertos en Asturias, van a ocho. Y, cuando les preguntamos que por qué lo hacen, nos dicen que les da igual repetir porque les presta mucho. No pasa nada, hay gente que va a misa todos los domingos, así que también puedes ir a un concierto una vez al mes. Además, va a haber alguna sorpresuca, con gente que estará por allí, pero no se puede contar tampoco mucho.
-Decía antes que hay gente joven en sus conciertos, ¿los conocen por sus padres o los descubren ellos solos y se vuelven fans?
-Como casi todo, es por influencia del entorno. Hay guajes pequeños que empezaron a escuchar nuestra música con los padres o con los güelos. A mí un chaval este año me dijo que en el coche de su güelu sonaba un casette de Los Berrones de los años 80 o 90. Así que al guaje le empezó a gustar y, ahora desde el móvil, es un seguidor de la virgen con trece o catorce años.
-¿Y cómo ve la escena musical asturiana? ¿Le parece que está mejorando?
-No lo sé porque la escena asturiana siempre está. Hay mucha gente que tiene grupos y que toca todo tipo de música, no solo rock, también folk, pop, rap... Hay mil historias y lo hacen cada vez mejor porque cada vez están mejor formados y son mejores músicos. Lo que pasa es que no hay impulso para apoyarlos y para que los asturianos vayan a los conciertos de esa gente. Por una parte, hay gente que pasa de todo y, por otra, hay gente que sí que apuesta por lo nuestro. Si viene Calzapitu de casa dios, nos parece que es una estrella de la virgen y resulta que tienes a otro al lado de casa y como es vecino no te parece que pueda ser estrella. Tienen que saber que también aquí, en Asturias, se hacen cosas guapas y tan válidas como en cualquier otro lado.
-Hicieron un diccionario de términos y expresiones 'berroniles', ¿cómo se les ocurrió tal cosa?
-Nosotros en todos los discos, cuando se editaban elepés, siempre metíamos todas las letras y, alguna vez, una pequeña traducción porque usábamos alguna palabra con algún sentido un poco diferente y jocoso. A raíz de la pandemia, nuestro representante insistió en que estaría guay hacerlo. Empezamos a darle vueltas, estuvimos buscando material hasta que completamos un librín que resultó ser muy guapo porque a la gente le gustó mucho. Tiene ilustraciones muy simpáticas de Neto y alguna aportación de otra gente como David Villa, Aitana Castaño y Marisa Valle Roso que explican los sentidos que tienen esas palabras para ellos.
Planes
-¿Y ahora qué proyectos tienen en mente para 2024?
-Es un punto en el que parece que la vida nos pide hacer algo nuevo. El último disco lo editamos a finales de 2018, o sea que lo trabajamos en 2019 y en 2020 ya tuvimos que pararlo. Se nos quedó un poco eclipsado por los acontecimientos, entonces igual ahora hay que hacer un disco, un par de temas o un videoclip. Estamos ya intentando sacar adelante alguna cosuca y a ver si, para la primavera, tenemos algo nuevo que poder ofrecer a la gente.
-¿Cómo se consigue estar más de 35 años en el mundo de la música y seguir con esas ganas y esa energía?
-Seguramente, ni planteándotelo. No te planteas hacer una cosa el año que viene, sino que lo vas haciendo. La música es algo que nos gusta, es una pasión. Si alguien piensa en rentabilidad: no es por eso. Rentabilidad la dan otras cosas, pero eso de hacer lo que te gusta y que encima le guste a alguien más es increíble. Es increíble que subas al escenario y que, con un tema que escribiste tú, tengas a 30.000 personas ahí abajo que lo conocen y que se ponen a cantarlo. ¡Coño!, eso es un subidón de la virgen y eso es lo que te hace estar tantos años y seguir disfrutando mucho de esto.
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