Carlsen y Lagno ganan el Memorial Steinitz de ajedrez

Finalizó el primer Memorial Steinitz, que ha sido organizado por la Federación Internacional en homenaje al primer campeón mundial de ajedrez, el pragués Wilhelm Steinitz, quien fue, además, el creador del primer sistema estratégico estructurado y, por lo tanto, el padre del Ajedrez Posicional.

Su obra The Modern Chess Instructor, publicada hace ya un siglo y cuarto, supuso una auténtica revolución en el mundo de las sesenta y cuatro casillas porque aportó una visión muy diferente acerca de la metodología de la estrategia y de los distintos avatares que se producen en la compleja batalla de ideas que acontece en el tablero. Su aportación fue muy criticada en aquellos tiempos porque supuso una ruptura total con la concepción que se tenía en aquel entonces, que era la propia del Romanticismo, del Ajedrez Romántico, cuya esencia era emplear todos los recursos disponibles en la búsqueda del rey del contrario. En aquella época, el ajedrez era considerado un arte, sólo un arte, por lo que su esencia no podía ser otra que la búsqueda de la belleza a través de espectaculares combinaciones destinadas, única y exclusivamente, a conseguir el jaque mate.

Wilhelm Steinitz demostró que no era necesario, ni tan siquiera acertado, empeñarse en lograr jaque mate desde los primeros movimientos y que se podía vencer gracias a lo que él denominó la «acumulación de pequeñas ventajas». Sus ideas triunfaron y llegaron hasta nuestros días, por lo que su contribución al mayor y mejor comprensión de las muchas complejidades de esta milenaria y apasionante Batalla de las Ideas tiene dimensiones oceánicas. El gran Wilhelm Steinitz fue el padre del Ajedrez Posicional y, por lo tanto, el fundador del Ajedrez Moderno.

La idea de recordar la memoria de los grandes pensadores de la ya muy dilatada historia de esta disciplina me parece acertadísima, en especial en estos tiempos en los que los jóvenes, y los no tan jóvenes, se muestran abducidos por los programas informáticos y sólo utilizan para el estudio los aparatos de silicio. Grave error.

El ajedrez es el arte del cálculo, dijo en gran David Iónovich Bronstein, pero no solo. La más Hermosa de las Batallas contiene otros ingredientes que resultan indispensables, como son los diferentes conceptos de la estrategia o las distintas técnicas en los finales de partida. Cada año que pasa me sorprendo más al observar que muchos jugadores no tienen claro el color de las casillas en las que deben colocar sus peones en función del alfil del rival, esto ya lo argumentó y demostró Wilhelm Steinitz, o bien yerran en el concepto de un sencillo final de torres. Esto no se puede conocer con Stockfish o Fritz, se aprende en los libros o con entrenadores que hayan estudiado esos conceptos. Si leyeran al gran Wilhelm Steinitz, o a los grandes pensadores que le sucedieron en la pedagogía ajedrecística, como Siegbert Tarrasch y Aarón Nímzovich, entre otros, no les sucedería lo que acabo de mencionar. El recordatorio de este grande de la historia del ajedrez no sólo es muy merecido, sino imprescindible. ¡Que Caissa le tenga en su gloria!

En cuanto al desarrollo del memorial, la Federación Internacional, en colaboración con el portal Chess24.com, organizó dos torneos, uno abierto y otro femenino, con diez ajedrecistas en cada uno de ellos. Ambos litigios se jugaron mediante un sistema de liga a doble vuelta y las partidas se disputaron con un ritmo de tres minutos, más dos segundos de añadido por cada movimiento realizado.

La prueba principal reunió una muy buena nómina de figuras de primer nivel, con el actual campeón mundial Magnus Carlsen al frente. El noruego ha ganado ya cinco oros en el mundial de ritmo relámpago. Tres tiene el ruso Alexánder Gríschuk, que no tuvo su mejor torneo y quedó último, y uno el vietnamita Le Quang Liem, que empató en la cuarta plaza.

El vencedor fue Magnus Carlsen, que comete muchos menos errores que los demás y mantiene el nivel muy alto durante mucho más tiempo. Estas son las dos claves de su éxito, las que le permitieron aventajar en dos puntos al segundo clasificado, el ruso Daniil Dúbov, campeón del mundo de ajedrez rápido hace dos años, que fue el gran animador de la competición. Era el líder de la prueba cuando faltaban cinco rondas por disputar y, entonces, se vino abajo y cosechó tres derrotas seguidas. El veterano gran maestro Peter Svídler, ocho veces campeón de Rusia, del que algunos decían que ya no estaba para estos retos tan veloces, demostró el error de dichas apreciaciones y completó el podio.

El español David Antón partió como último del ránking y finalizó penúltimo, a dos puntos del tercer clasificado. Su actuación fue buena, especialmente porque a este ritmo tan acelerado sufre mucho y sus rivales pertenecían todos a la élite mundial, con mucho más ráting que él. Incluso se permitió el lujazo de apretar, y mucho, al mismísimo Magnus Carlsen en su segundo enfrentamiento, aunque no pudo rematar una excelente faena que terminó con el reparto del punto.

El torneo femenino reunió a muy buena parte de las mejores jugadoras del mundo y resultó muy emocionante, al extremo que finalizó con dos ajedrecistas empatadas en la primera plaza de la tabla. Al final, fue la rusa Katerina Lagno, actual campeona del mundo femenina de blitz, la que ganó la prueba, aunque no lo tuvo nada fácil. La china Tiengjie Lei, tercera del ránking mundial de la especialidad, realizó los mismos puntos que ella, doce de los dieciocho posibles, al término de la liga a doble vuelta que disputaron, por lo que hubo que recurrir al conocido Sistema Armagedón para desempatar. La rusa, más experta, condujo el segundo color y logró la victoria, con lo que se adjudicó el primer puesto, mientras que la china hubo de conformarse con la segunda posición. La kazaja Zhansaya Abdumalik completó el podio. Los vencedores de ambas competiciones son los dos actuales campeones del mundo de ajedrez relámpago.

Todo el desarrollo de los dos torneos se retrasmitió en directo en el portal Chess24.com, con comentarios del gran maestro Pepe Cuenca y del maestro internacional David Martínez.

Y, muerto el rey, viva el rey, porque esta misma tarde, a partir de las cuatro, se pondrá en marcha otro torneo de enorme interés. Se trata del Lindores Abbey Rapid Challenge, que integra el Magnus Carlsen Tour, y presenta una nómina de auténtico lujo. Magnus Carlsen, Liren Ding, Hikaru Nakamura, Alexander Gríschuk, Levón Aronián, Jan Krístof Duda, Daniil Dúbov, Wesley So, Yangyi Yu, Serguéi Kariakin y Alireza Firouzja se enfrentarán en una liga con partidas de quince minutos, más diez segundos de añadido por movimiento efectuado. Todos los litigios se retrasmitirán en directo también en Chess24.com.