Festival navideño en Pumarín

No podía haber mejor despedida en Pumarín de un año 2017 inolvidable para la afición del Unión Financiera. El equipo ovetense disputó el mejor partido en lo que va de temporada, consiguiendo un convincente triunfo por 80-57 ante el Iberostar Palma.

Los de Carles Marco realizaron dos primeros cuartos para enmarcar, en los que dejaron listo para sentencia el duelo ante el conjunto de Xavi Sastre, que se fue al descanso con tan solo 19 puntos en su casillero gracias al buen trabajo defensivo de los ovetenses y a un nefasto acierto en los lanzamientos a canasta con un 8 de 34 en tiros de campo.

Por su parte los de Carles Marco tuvieron en la figura de Mouhamed Barro, MVP del partido con 26 tantos de valoración al anotar 15 puntos y lograr 12 rebotes, el desequilibrante del partido. El ala-pívot senegalés se mantuvo los diez minutos del primer cuarto sobre la cancha en los que logró 8 puntos y 9 rebotes, en su mejor actuación desde que viste la elástica del OCB.

Ya en ese primer cuarto, y tras la canasta inicial de Gediminas Zyle con la que se estrenaba el marcador, los ovetenses pusieron rumbo directo a su sexta victoria en el 'fortín' de Pumarín con un parcial de 14-0 en los siguientes cinco minutos y medio.

El cuadro balear no era capaz a reaccionar y tan solo se sustentaba en Zyle, artífice de los 8 puntos del equipo en los primeros diez minutos, mientras que el Unión Financiera cerraba el mismo periodo con 21 puntos en su casillero tras un Alley-oop de Romaric Belemene a asistencia de Fran Cárdenas, que hacía que la grada de Pumarín se levantase de sus asientos para despedir a su equipo al final del cuarto.

Con la misma dinámica del arranque los de Marco abrían aun más la brecha en el electrónico con un juego sobresaliente de toda la plantilla, Davis Geks anotaba desde el perímetro, Óliver Arteaga volvía a adueñarse de metros sobre la pintura, Cárdenas y Fabio Santana dirigían como maestros de orquesta al equipo, e incluso el mal desde el tiro libre desaparecía con un 100% de acierto al descanso.

La unión de todos estos factores hizo que la renta se elevase rápidamente por encima de los veinte puntos y Barro sumase a dos minutos del descanso, tantos puntos como el Palma, 15. Un conjunto balear que tenía en ese momento a Roger Fornás como único sostén en ataque.

A su marcha a los vestuarios y con el 42-19 en el electrónico de Pumarín, la segunda mitad del partido iba a ser un mero trámite, aunque los campeones de la Copa Princesa no quisieron desaprovechar la oportunidad de poner una velocidad más al partido en la reanudación y seguir su progresión ascendente.

En el último cuarto Carles Marco repartió minutos entre los jugadores menos habituales, dándole de nuevo la oportunidad al canterano Alonso Meana, quien disfrutó de tres minutos y logró anotar cuatro puntos desde la línea del tiro libre.

Con un buen inicio de cuarto el equipo logró alcanzar su máxima renta del partido, 33 puntos (67-34) que hizo pensar por momentos en la mayor victoria histórica del equipo como local desde que milita en la LEB Oro, que se remontaba al 4 de enero del 2015 cuando vencieron por una renta de 35 puntos al Prat (101-66).

Pero una relajación final y la lógica bajada de intensidad defensiva del equipo, junto al gran acierto de Ben Mockford desde el tiro exterior, con cuatro triples en los diez minutos, hizo que la diferencia se redujese finalmente por debajo de los treinta puntos, hasta los 23 finales (80-57).

A pesar de que el partido ya no tenía nada en juego, la desesperación en los baleares llevó a Rafa Huertas a cometer una falta técnica y tras las consiguientes protestas al colegiado recibió la segunda técnica y consiguiente descalificación.

Con esta tercera victoria consecutiva, y cuarta en Pumarín, los ovetenses se sitúan en la cuarta posición de la tabla con 10 triunfos en quince partidos, a uno del Manresa y dos de los colíderes Prat y Lugo, aunque los gallegos cuentan con un partido menos en su haber.

La plantilla del Unión Financiera disfrutará ahora de unos merecidos días de vacaciones para pasar de la navidad con sus familias, y el martes volverán al trabajo para preparar lo que será el último compromiso del año, el viernes en Huesca.