El Liberbank despierta de su sueño de la ACB

Pero, aun así, los hombres de Javi Rodríguez estuvieron a punto de forzar la prórroga en el último suspiro. Con un saque de banda de Sergio Llorente sobre Bryce Douvier, cuyo lanzamiento bajo la canasta no entró, lo que puso definitivamente el punto final a la eliminatoria y a la temporada para el conjunto ovetense.

El equipo carbayón, no obstante, mantuvo vivas sus opciones de llevarse el triunfo durante gran parte del partido, sobre todo tras la recta final de la primera mitad, después de estar quince puntos abajo (37-22). A partir de ese momento, los hombres de Javi Rodríguez dieron un paso adelante en defensa y aumentaron su intensidad. Ello implicó una mejora en el cierre del rebote, sin ceder segundas opciones a los orensanos, quienes, al igual que en los partidos disputados en Pumarín, sacaron provecho de las facilidades defensivas de los azules.

Esa notable mejoría atrás, junto al acierto en el lanzamiento exterior, a un nivel similar al visto durante la fase regular, hicieron que el Liberbank se fuese al descanso con una desventaja de siete puntos (42-35), pero con la sensación de encontrarse un paso por encima de los hombres de Gonzalo García de Vitoria.

La progresión mostrada por los ovetense tuvo su continuidad, además, en la reanudación, en la que el Liberbank Oviedo se situó a dos puntos (42-40) después de un triple de Roope Ahonen. Esa igualdad en el electrónico hizo que los nervios se apoderasen de ambos equipos dado lo mucho que había en juego, lo que se reflejó sobre la pista.

El Liberbank Oviedo logró romper la defensa gallega con los lanzamientos desde el perímetro de Ahonen y Llorente ante la ausencia de su hombre fuerte sobre la pintura, el tinerfeño Óliver Arteaga, quien no pudo jugar la segunda mitad del partido tras sufrir un golpe. En cambio, los locales recurrieron a la fortaleza física de Sergio Rodríguez, Earl Watson y, en especial, Jhornan Zamora para hacer daño con su juego interior. Precisamente una canasta sobre la bocina de este último echó el cierre al tercer periodo con un 58-55 en el marcador.

El buen arranque en el cuarto definitivo de Bryce Douvier permitió a los jugadores ovetenses completar la remontada y alcanzar una máxima renta de tres puntos, con la afrontaron los cuatro últimos minutos del partido.

Pero nuevamente la figura de Zamora resultó clave para la resolución de un partido que vivió un último minuto de infarto al igualarse el marcador hasta en dos ocasiones. El venezolano se echó el equipo a la espalda en una tarde-noche mágica para él al anotar dieciocho de los últimos veintiún puntos del Ourense, dieciséis de ellos en el último cuarto, en el que acabó con el sueño del Oviedo.