«Sin las pioneras que empezaron a jugar sería imposible estar en esta final»

Montse Tomé, sierense nacida en Oviedo en 1982, está cumpliendo un sueño. No de la forma que lo había visualizado cuando, tras años dando patadas a un balón, se dio cuenta de que podía hacer carrera en el fútbol. No vestida de corto jugando la final de un Mundial, pero sí siendo una de las piezas clave del cuerpo técnico de la Selección Española de Fútbol Femenino, que está haciendo historia y que el domingo puede alzarse con la ansiada copa si vence a Inglaterra. «La vida al final te da otra oportunidad y puedes vivir los sueños de otra manera».

–Cuando empezó a jugar, ¿quiénes eran sus referentes?

–Me gustaba mucho Guardiola. En esa época buscaba a jugadores de mi posición: Xavi Hernández, Iniesta... David Villa también es un futbolista que me gustaba por su juego y personalidad. Zidane también era un jugador que me parecía muy interesante en su juego. Ibas cogiendo un poco de todos.

–Demostraba gusto por el balón.

–Eso sí que es cierto. Es un fútbol que me gusta, el que practicamos aquí en la selección y el que también pude desarrollar en los equipos en los que me formé.

–Sus referentes cuando empezó eran hombres. Ahora hay mujeres que ocupan ese papel.

–Sí. Veo a niños con camisetas de Alexia, de Jenny, de Ivana, de Esther, de Aitana. Veo que cualquiera, tanto hombre como mujer, puede llevar una camiseta de una mujer futbolista. Eso sí que ha cambiado. Los medios de comunicación habéis hecho algo muy importante, que es que el fútbol femenino se pueda ver. Al final, cuando encienden la televisión y ven algo que les gusta, los niños y todos los que les gusta el fútbol, lo idolatran. Y ahí es donde empiezan a decir que quieren ser como Alexia. Eso es muy importante. Y luego también que estos referentes femeninos cada vez sean más reconocidos a nivel de UEFA y de FIFA. Eso antes tampoco ocurría.

–¿Hace veinte años era impensable?

–Lo primero, porque era muy difícil ver nuestros partidos. El fútbol que se veía era diferente. Y todo ha cambiado mucho. Pero aquella época es fundamental para entender lo que ahora vivimos. Es como una cadena. Sin las que empezaron esto, sería imposible disfrutar lo que tenemos ahora. Y todas esas jugadoras tienen que sentirse parte de esto.

–¿Cómo ha cambiado el fútbol femenino durante todos estos años?

–Ha evolucionado mucho. Antes teníamos muchos menos recursos: en tiempo de entrenamiento, en instalaciones, cuerpos técnicos... Ahora las jugadoras pueden vivir del fútbol y es otro juego, más rápido, con más calidad. También las niñas pueden empezar antes en equipos de fútbol, solo femeninos y también mixtos. Eso es algo que antes no ocurría.

–¿Queda aún mucho camino por recorrer?

–Hemos progresado mucho. Siempre creo que en los momentos más complicados es bueno que lo comentemos. Sabemos de dónde venimos. Hemos seguido persistiendo en nuestro fútbol. Lo importante para nosotras era jugar. A partir de ahí, hemos conseguido los éxitos a base de trabajo.

–¿Qué es lo que hace falta para darle el impulso definitivo al fútbol femenino?

–Paciencia. Y seguir trabajando como hasta ahora.

–¿Son conscientes de la ilusión que han generado enEspaña?

–Sí, nos llega porque estamos en contacto con familiares que nos comentan cómo están siguiendo los partidos. Vemos las portadas de los diarios y medios de comunicación. Y ahí sí que nos damos cuenta un poco del impacto que estamos teniendo en España y de la mucha gente que nos está siguiendo. Es una alegría enorme, un orgullo que se identifiquen con los valores de esta selección. Y también que nos manden ánimo, que lo necesitamos.

–Por ejemplo, se lo van a mandar desde Gijón, donde van a instalar una pantalla gigante en la Plaza Mayor para ver la final.

–Sí, lo vi en un tuit que me pasaron y me pareció increíble. Ver que hay tanta gente en la calle, en Gijón, viendo un partido de la selección. Ver que niños y niñas nombran a las diferentes jugadoras y se mueren prácticamente por ellas. Vivir de esa manera los goles que metimos a Suecia. Es muy bonito poder, con tu trabajo, hacer feliz a tanta gente.

–¿Se la define como la mano derecha de Jorge Vilda y la que mejor conecta con el vestuario?

–Llevamos cinco años juntos. He aprendido a ser segunda entrenadora. Esto tiene muchos meses de observación, conocer a Jorge, el fútbol que lleva dentro, y adaptarte a él. Él es quien tiene que tomar las decisiones. Y nosotros estamos al servicio de todo lo que él necesita. Lo importante es conocer a las jugadoras pronto, adaptarte a sus necesidades y ayudarlas. Es cierto que lo que recibo de ellas es positivo.

–El fútbol de la Selección es vistoso. ¿Cuánto ha costado llegar a este modelo?

–Es un modelo de juego que lleva implantado más o menos catorce años. Es una metodología y una manera de sentir el juego desde el fútbol asociativo, cuidar los detalles con el balón, potenciar nuestra fase ofensiva y prepararte para defender pronto. Lo trabajamos con las niñas en edades muy tempranas. Y cuando llegan a la absoluta, lo que recibes es el fruto de ese trabajo. Nuestras jugadoras han estado en casi todas las categorías inferiores y la esencia de nuestro juego no cambia.

–¿Cuál ha sido la clave de este grupo para poder llegar a donde están ahora mismo?

–La clave es seguir creyendo en el trabajo. Hemos pasado un año duro. Veníamos de una Eurocopa en la que perdimos contra Inglaterra. En los siguientes once partidos que jugamos conseguimos nueve victorias y un empate y eso nos ha hecho crecer.

–¿Qué sintió cuando Suecia empató la semifinal?

–Pasó todo muy rápido. Acababas de marcar un gol, luego te empatan tan rápido. Nos habíamos reunido cerca de la banda. Estábamos convencidos de que necesitábamos tener paciencia, control y cabeza para gestionar los últimos minutos. Y justo después de un saque de banda, te marcan el gol. Son cosas que pasan en el fútbol, pero el equipo reaccionó bien. Desde ese saque de centro se buscó el córner que nos dio el gol. Y no tuvimos tiempo para pensar mucho. Fue actuar y nos salió bien.

–Hay jugadoras que están haciendo un torneo enorme. Hablo de Aitana, de Salma... ¿Vemos futuras balones de oro en alguno de estos casos?

–Tenemos la suerte de contar con un grupo de 23 jugadoras increíbles. Todas tienen un talento diferente. Salma es una jugadora joven, tiene condiciones para el fútbol muy buenas. Seguramente seguirá creciendo y progresando porque tiene una capacidad de trabajo muy buena. Y todas las demás tienen un talento especial. Hay que seguir confiando en ellas, cuidándolas, estando cerca para ayudarlas. Y en eso estamos. Con ganas de que pasen estos días y podamos disputar la final.

–En la última Eurocopa España puso el juego e Inglaterra algo de experiencia y contundencia. ¿Cómo afrontan este partido?

–A Inglaterra la conocemos bien, es una selección potente. En esa Eurocopa fuimos el mejor equipo que jugó contra Inglaterra. Ahora estamos con muchas ganas. Sabemos sus virtudes, pero llegamos en el mejor momento.

–¿La derrota contra Japón supuso un punto de inflexión para ustedes?

–Fue un punto importante. Japón nos sorprendió con los cuatro goles. Nos hicieron daño en transiciones, algo que no esperábamos de Japón. Perdimos 4-0. Eso nos hizo valorar y ponernos en situación. Al día siguiente, volvimos a entrenar con la confianza de que lo podíamos sacar. Al final, aprendimos de esa derrota. Nos enseñó que teníamos que seguir trabajando duro si queríamos estar en la final que vamos a poder disputar el domingo.

–¿Cuál es el grado de confianza para esa final?

–Máxima. Estamos con la máxima concentración y foco en lo importante que es prepararnos y descansar. Con la máxima confianza de creer en el trabajo y que nos pueda salir bien.   

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