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Pelayo Suárez, Sandoval, Pablo García e Isma Aizpiri, con Gaspar, Garci y Chiki detrás, durante un entrenamiento. JUAN CARLOS TUERO
Derbi con aroma a reivindicación

Derbi con aroma a reivindicación

Alejados de las primeras plazas de la clasificación, gijoneses y carbayones cruzan sus caminos con la ambición de finiquitar su sequía de triunfos

I. ÁLVAREZ / C. GONZÁLEZ

GIJÓN / OVIEDO.

Domingo, 20 de octubre 2019, 01:21

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El Molinón acoge un pulso entre Mareo y El Requexón este mediodía (12 horas). Los filiales del Sporting y del Oviedo, estandartes de los dos grandes viveros futbolísticos asturianos, miden sus fuerzas para dirimir su liderazgo en busca de un triunfo de prestigio.

Con una ventaja azul de tres puntos antes de que el balón eche a rodar, gijoneses y carbayones ambicionan un golpe de efecto que contribuya a reforzar dos proyectos remodelados este curso, con nuevos entrenadores para guiar la progresión de los jugadores más próximos a escalar el último peldaño de la escalera formativa. Jóvenes que este mediodía disponen de un escaparate de excepción para poner luz en un inicio de temporada cargado de claroscuros en ambos clubes, que situaron a los mandos del primer equipo a los dos entrenadores que diseñaron desde el banquillo el último derbi de filiales en El Molinón.

Con la esperanza de seguir la estela ascendente de sus antiguos técnicos y reencontrarse con ellos pretenden reivindicarse este mediodía en una cita con trasfondo balsámico, ante la posibilidad de reconciliarse con la victoria para suturar las heridas abiertas en las últimas jornadas. Reñidos con el gol, los rojiblancos claudicaron en las dos etapas de alta montaña ante los equipos que comandan la tabla clasificatoria, mientras que los azules han pasado el tríptico gallego sin poder puntuar. Cortos de munición a las puertas de un duelo con un marcado componente emocional que en sus tres últimos precedentes se ha teñido de azul.

Los oviedistas, que hicieron pleno en los derbis del pasado curso, le han tomado la medida a su gran rival y se han mostrado inmunes a la derrota en las cuatro últimas confrontaciones ligueras ante los gijoneses. Una estadística que el conjunto carbayón pretende prolongar e incrementa la motivación sportinguista, con un anhelo de revancha que su entrenador, Samuel Baños, confía en canalizar para convertirlo en un acicate.

Invicto en los derbis durante su etapa como centrocampista en el primer equipo sportinguista, el técnico maliayo, que recupera a Isma Aizpiri tras cumplir su sanción, se estrena como entrenador en El Molinón con uno de sus bastiones en ataque, César García, renqueante del esguince que le relegó a la suplencia en el choque ante el líder. No es el único rojiblanco entre algodones, ya que Bogdan sufrió el jueves una contusión en el pie. Con la vuelta al grupo de Guille Rosas, la única baja confirmada es la de lesionado larga duración Zalaya.

Más llena está la enfermería azul, en la que se mantienen Tarsi Aguado, Aitor Lorea y Javi Mier, a expensas de si la mejoría de Steven le alcanzar para estar en condiciones físicas de disputar el partido este mediodía. Emilio Cañedo recupera a Viti y De Barr, pero tendrá una semana más la baja de Samuel Obeng, reclutado de nuevo por Javi Rozada para el primer equipo. El técnico oviedista desplaza a todos los jugadores disponibles a Gijón, donde podría apostar de inicio por Jaume Valens; Jorge Mier, Ugarte, Josín Martínez, Pierre Cornud; Róber Sierra, Riki, Viti, Roberto Alarcón, Vanderson y Javi Cueto.

Efecto dominó bajo palos

En los rojiblancos, la lesión de Christian Joel y la consecuente presencia de Javi Benítez con el primer equipo en Elche ha abierto la puerta al estreno en Segunda B de Joel Jiménez, que viviría su bautismo competitivo en la categoría de bronce del fútbol español. Con la expedición del primer equipo de regreso esta madrugada, Samuel Baños citó ayer a los dos guardametas y al juvenil Javi Izquierdo, aunque dejó entrever que confiará la custodia de la portería al habitual suplente.

Se postulan para ayudar al cancerbero avilesino en esa labor Bogdan, Villalón, Pelayo Suárez, Espeso; Gragera, Mecerreyes; Garci, Chiki y Bertín, con Pablo García y César pugnando por una plaza en el costado izquierdo. Bajo la mirada de Michu y los dirigentes oviedistas César Martín y Manolo Paredes, presentes en el estadio en otro paso hacia la recuperación de las relaciones cordiales entre directivas, rojiblancos y azules pugnan por la hegemonía en El Molinón.

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