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Cundi y Vili, en el I Trofeo Principado, en Oviedo, el 10 de agosto de 1988. E. C.
Derbi Oviedo - Sporting | Los derbis son menos caseros

Los derbis son menos caseros

Dani Martín, Canella, Nacho y Pablo Pérez son los únicos canteranos del Sporting y Diegui Johannesson y Saúl Berjón, los del Oviedo

M. ROSETY

Sábado, 17 de noviembre 2018, 15:37

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Uno de los detalles que caracteriza a los derbis de esta nueva etapa es la falta de jugadores asturianos, en comparación con los tradicionales, en los que una mayoría de futbolistas eran de la región y tenían unos vínculos de una amistad real, con un ambiente de deportividad envidiable. Ahora se aplican otras costumbres con menos implicación en las raíces del fútbol regional.

En los tiempos actuales, tanto el Sporting como el Oviedo utilizan unas políticas de fichajes con una mayoría de jugadores de fuera, con una presencia mínima de canteranos. Esta temporada, el Sporting sólo tiene cuatro en su plantilla, de los que Canella es el más asiduo, con intermitencia para Pablo Pérez, reaparecido en las últimas jornadas, y Nacho, además del portero Dani Martín. En el caso del Oviedo, los únicos asturianos son el lateral Diegui Johannesson y el interior Saúl Berjón, quienes son habituales titulares. El resto de futbolistas de la región que puedan ser utilizados por los entrenadores de los primeros equipos se trata de jugadores del filial que dan el salto ocasionalmente.

La paciencia con la cantera es un aspecto que no se contempla, en parte porque los entrenadores y los directores deportivos también son importados, según los criterios de los propietarios de las entidades, sin mentalidad de confianza en la gente de la casa. El consejo que preside Javier Fernández escogió a Montes Torrecilla en el verano de 2017, tras un análisis de varias opciones, y el grupo mexicano que es dueño del Oviedo se decantó por el ex futbolista tampiqueño Joaquín del Olmo. Las líneas de trabajo de ambos técnicos es la de remodelar media plantilla. Ambos coincidieron en este curso en el número de incorporaciones, diez en cada equipo, todos llegados de fuera, con una importante presencia de jugadores extranjeros. En las canteras de los dos clubes hay jugadores con una proyección interesante, con casos en los que ya se pueden considerar realidades, pero las exigencias dan más credulidad a los denominados refuerzos.

En tiempos pasados, era norma que los equipos se fortalecieran con jugadores foráneos, pero una base importante de la plantilla estaba compuesta por gente de la casa, formados en la cantera local o provincial. Además, los futbolistas rivales tenían una buena relación, que en numerosos casos venía por la coincidencia previa en la selección juvenil de Asturias, que aglutinaban a los mejores jugadores de la región, la mayoría de los cuales eran fichados por el Sporting o el Oviedo. Algunos ejemplos son los de los juveniles más destacados de mediados los años 60, época en la que Tensi y Prieto, del Alcázar de Sama, pasaron al Oviedo, donde ya estaba Quirós, mientras que el Sporting fichó a García Cuervo, de La Braña, y 'Tati' Valdés, del Caudal. Lavandera llegaría años más tarde, tras pasar por el Real Madrid y el Celta.

En los tiempos en los que no existía el derecho de retención, los jugadores que más tiempo solían estar en los equipos eran canteranos, quienes con el paso del tiempo se ganaron la capitanía para convertirse en futbolistas legendarios en sus clubes respectivos. En el Oviedo, Falín fue uno de los clásicos en los años 40 y 50, así como Toni Cuervo, quien con 17 campañas de azul es uno de los históricos de la entidad azul. En el Sporting, en aquellas décadas estuvieron, entre otros, Prendes, Tamayo y Sánchez, para luego coger el testigo Ortiz y Medina.

En épocas más modernas, clásicos de la capitanía en los derbis fueron Cundi y Vili, cuando se reanudaron los contactos de partidos entre ambos conjuntos, con la institución del Trofeo Principado, para luego dejar el brazalete a Joaquín y Berto. El ex rojiblanco marcó un registro difícil de igualar, al ser el futbolista del Sporting que más partidos oficiales disputó con la elástica gijonesa, con 640 participaciones, mientras que en el caso de Berto tiene el récord de haber disputado 17 derbis sin conocer la derrota.

En la actualidad, el brazalete no tiene una identificación con las canteras, porque en los equipos cada vez hay menos jugadores formados en la casa. Un derbi suele provocar unas motivaciones especiales, incluso para los extranjeros, pero jugadores que hayan tenido la experiencia de la rivalidad desde el fútbol base cada vez tienen menos protagonismo. Los derbis de ahora son menos caseros.

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