El Sporting B se cruza con el espejo para zanjar su racha de derrotas

De vacío en sus dos primeros encuentros tras el relevo en el banquillo, el joven conjunto sportinguista confía en obtener su primer triunfo a las órdenes de Isma Piñera, que ha puesto el foco sobre el que guiar la mejoría en la parcela defensiva. Consciente del talento en ataque de su adversario, el técnico gijonés tiene claro que su equipo debe elevar el funcionamiento sin balón para cumplir con su propósito de tapiar la portería defendida por Christian Joel y reconciliarse con la victoria.

Isma Aizpiri, sancionado por acumulación de cartulinas amarillas, se une a las bajas de los lesionados Javi Benítez y Mateo, mientras que estarán disponibles Pedro Díaz y Berto Espeso y Pelayo Morilla. Los dos primeros fueron titulares con el primer equipo en el duelo de Copa del Rey ante el Eibar el pasado jueves, después de que el extremo ovetense cerrase con triunfo el doble encuentro con la Selección Española sub 18 frente a su homóloga portuguesa.

Isma Piñera, que ha citado a los veinte jugadores disponibles para este mediodía, recupera a Rubén Sánchez y a Neftali para imprimir verticalidad a un ataque en el que Gorka Santamaría ejerce como referencia ofensiva. El ariete bilbaíno, máximo artillero del filial sportinguista este curso con media docena de dianas, trarará de aplicar sobre el césped ese refrán que sostiene que no hay peor cuña que la de la misma madera para zanjar una sequía de dos jornadas a costa del club en el que se formó.

Con un punto de ventaja sobre el conjunto de Lezama, Isma Piñera podría apostar por Christian Joel; Bogdan, Pelayo Suárez, Zalaya, Alberto Espeso; José Gragera, Pedro Díaz, Ramón; Bertín, Gorka Santamaría y Neftali para tratar de amargar el estreno a Solabarrieta, que ha tomado el mando esta semana dentro del efecto dominó de la destitución de Eduardo Berizzo. Tras la goleada al Langreo, el técnico gijonés asume que habrá continuidad respecto a jugadores y tiene la incógnita de la disposición táctica que empleará un rival frente al que espera zanjar su racha de derrotas y lograr un punto de inflexión.