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Rahm, durante una competición. REUTERS
La Europa de Rahm y García, a recuperar el dominio en el Abierto Británico de golf
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La Europa de Rahm y García, a recuperar el dominio en el Abierto Británico de golf

Las últimas ediciones estuvieron marcadas por las victorias de los estadounidenses, que recuperan a Tiger Woods para esta edición

efe

Madrid

Miércoles, 18 de julio 2018, 20:24

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El estadounidense Tiger Woods, regresa entre los favoritos al Abierto Británico, que se disputa esta semana en el inusualmente seco y endurecido recorrido de Carnoustie, en la costa occidental escocesa, y que reunirá a la «flor y nata» del golf mundial, entre ellos Jon Rahm y Sergio García.

El «Tigre», con 42 años y 20 participaciones en el Abierto Británico, que se estrenó en los links en Carnoustie hace 23 años, y Phil Mickelson, con 48 años, 25 participaciones y una victoria en 2013, son los veteranos de una poderosa delegación estadounidense que incluye a los ganadores de las tres ediciones anteriores.

«Siento que entiendo mejor mi juego, mi cuerpo y mi swing», dijo Woods, ganador de tres Open británicos (2000, 2005 y 2006), que regresa al tercer grande del año después de tres años de ausencia y recuperado de una larga lesión de espalda.

Jon Rahm busca resarcirse

En el bando europeo destaca el joven español Jon Rahm, número cinco del mundo, que no ha destacado en sus dos participaciones anteriores, pero llega «muy confiado» a Carnoustie, después de dos victorias en Estados Unidos y dos en Europa en su corta carrera profesional.

«La habilidad y la experiencia ya están acumuladas para esta semana», dijo a Efe Rahm, que viene de quedarse entre los cinco primeros en los recorridos tipo link, similares a Carnoustie, de los Abiertos de Francia e Irlanda.

En lo que respecta a los favoritos locales, a pesar de que no ha ganado un inglés desde 1992, los británicos tienen puestas las esperanzas esta semana en Tyrrell Hatton, Justin Rose, Tommy Fleetwood y Paul Casey, y el norirlandés Rory McIlroy, ganador del Open de 2014, que no ha vuelto a ganar un grande desde ese año.

Los cuatro ingleses y el norirlandés forman parte de la escuadra provisional para la Ryder, junto con Jon Rahm, el sueco Alex Noren y el italiano Franceso Molinari, que acumula dos victorias y dos segundos puestos en sus últimos cuatro torneos y llega también entre los favoritos europeos a Carnoustie.

«El Open requiere mucha sensibilidad e imaginación y creo que le faltaba algo de eso a mi juego», dijo el texano Jordan Spieth, ganador en 2017 en Royal Birkdale, después de las victorias de sus compatriotas Justin Thomas en 2016 y Zach Johnson en 2015.

Europa quiere volver a ganar

El dominio estadounidense de los últimos Abiertos Británicos es un ingrediente adicional de la rivalidad entre los equipos de Europa y Estados Unidos, que se va cocinando a fuego lento a medida que se acerca la fecha de la Ryder Cup de finales de septiembre en París, la competición bienal entre los mejores golfistas de ambos lados del Atlántico.

En esta sede de nueve abiertos británicos, donde lleva más de dos meses sin llover, la dureza de las calles, «que están más rápidas que los greenes», en palabras de Tiger Woods, y la extrema dificultad de los últimos tres hoyos serán una prueba suficiente para los aspirantes a participar en la Ryder y ganar la jarra de clarete del Open Británico.

«No hay una estrategia perfecta que elimine el riesgo», ha sentenciado el irlandés Padraig Harrington, ganador de la edición de 2007, la última que se disputó en Carnoustie, el recorrido más largo de la rotación de los Open, que se ha acortado este año.

«Van a tener que se capaces de adaptarse. Ver lo que hacen sus compañeros de partida y aprender sobre la marcha», agregó Harrington, ganador de dos Open Británicos, la última vez en 2007 en un histórico desempate con el español Sergio García.

«Es complicado, pero no injusto. En estas condiciones, la hierba alta es mejor que la trampas de arena», dijo a Efe García sobre la posibilidad de jugar desde la hierba seca y la dificultad agregada de los profundos búnkeres, que ejercen de imanes de las bolas que aterrizan a su alrededor.

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