Antonio Suárez: «Un país como México no lo acaba ni Trump, ni nadie»

Las continuas amenazas de Donald Trump sobre una posible ruptura del Tratado de Libre Comercio no deberían frenar ni amedrentar a las empresas asturianas con intereses en México ya que, entienden los empresarios asturianos ya asentados en este país, debe dárseles una importancia relativa. «México tiene una enorme relación con los Estados Unidos y se va a mantener», vaticina el piloñés Eduardo Cepeda, presidente de la Asociación de Empresarios Asturianos en México.

Cepeda lanzó en este sentido un mensaje de tranquilidad en el marco del foro 'Relación Bilateral México-Asturias' que se celebró en la capital azteca con motivo de la visita institucional del Gobierno regional e, incluso, habló de las grandes oportunidades de negocio que se presentan hoy para las firmas asturianas en el país latinoamericano. «En metal mecánico y en servicios hay gran potencial porque el mercado mexicano crece a ritmos importantísimos», destacó Cepeda quien, incluso, apuntó que el sello 'asturiano' es una ventaja añadida para cerrar acuerdos. «En los momentos más delicados de un país es cuando hay que apostar por él», llegó a decir. Admitió que las inversiones en sentido contrario, de México hacia Asturias, son más complicadas. «En este caso el factor emocional ocupa un segundo lugar y se toman decisiones basadas más en expectativas económicas» que llevan, dijo, a que muchos de estos inversores aboguen por operaciones «más de carácter nacional y no solo en Asturias».

Sobre las amenazas de Donald Trump también hablaron otros empresarios asturmexicanos que ayer participaron en el citado foro. Antonio Suárez, presidente y accionista del Grupo Marítimo Industrial, entiende que la «personalidad volátil» de Trump, que «un día dice una cosa y otro otra», no debe condicionar la economía de esta nación. «Un país como México no lo va a acabar Trump, ni nadie», sentenció Suárez, quien vaticina que finalmente el tratado simplemente deberá afrontar una revisión, como ocurre con otros acuerdos entre países. «El problema es que tanta demagogia y teatro están poniendo el mundo a temblar», dijo.

También José Miguel Fernández, con raíces en Caravia y administrador de Fuensanta, y el responsable comercial en México de Duro Felguera Energy, el llanisco Vicente Tamés, admitieron que en estos momentos el mercado mexicano es muy susceptible a cualquier declaración de Trump, pero coincidieron en la necesidad de relativizar esta amenaza. «Es mucho ruido, pero al final todo vuelve a su cauce», declaró Fernández.

El presidente de Fade, Pedro Luis Fernández, y el consejero de Industria, Francisco Blanco, ven en esta situación política una «oportunidad» para las empresas asturianas. «Teniendo en cuenta los problemas que México está teniendo con otros socios más cercanos, estamos orgullosos de recordarles que sigue habiendo una tierra que se acuerda de ustedes y que está ahí para hacer negocios», manifestó el consejero.

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