Asturias gastó 232 millones en los ERTE durante el primer año de pandemia

Así, en el primer mes que comenzaron a pagarse los ERTEderivados de la covid-19, abril del pasado año, los 41.084 trabajadores acogidos a esta fórmula de protección laboral recibieron un total de 41 millones de euros en Asturias, por los 27,3 que se pagaron en concepto de paro y demás subsidios para desempleados, según datos del Servicio Público de Empleo. Para entonces, y a pesar de los ERTE, el tejido laboral de la región sufría daños. El paro registrado alcanzaba las 83.793 personas, 6.000 más que en el mes anterior.

Las nóminas de los ERTE en Asturias siguieron disparadas durante dos meses más. Los pagos de mayo y junio, correspondientes aún al último tramo de lo más estricto del confinamiento y el inicio de lo que se denominó como desescalada, continuaron muy por encima de los derivados del desempleo, que se mantenían estables e, incluso, bajaban. Así, en mayo, los 58.677 asturianos acogidos a un ERTE cobraron un total de 51,7 millones de euros, por los 27,7 de los 47.910 desempleados de la región con derecho a recibir alguna prestación por no contar con un trabajo.En junio la tónica fue similar, aunque los pagos por las restricciones o suspensiones temporales de empleo comenzaban ya a bajar, fruto de la reincorporación de trabajadores a sus ocupaciones laborales. Durante ese mes, los empleados acogidos a ERTE cobraron 31,4 millones de euros, por los 25,3 que se pagaron por desempleo.

La tónica desde entonces fue diferente.Con unos pagos por desempleo que se movían en una horquilla de entre 21 y 24 millones de euros, la masa de las nóminas de los ERTE se desplomó de forma notable. El verano, con unas tasas muy bajas de contagios en Asturias y una sensación de que lo peor de la pandemia había quedado atrás, supuso la reincorporación de muchos trabajadores a sus empleos, con bajadas paulatinas de los pagos y los beneficiarios, que tocaron suelo en octubre. Durante ese mes, 14.691 continuaban cobrando el total o parte de su nómina a través del Servicio Público de Empleo por seguir aún regulados, lo que supuso un desembolso de 7,3 millones de euros.

La llegada de la segunda ola tuvo un reflejo directo sobre las cifras de trabajadores regulados, con un incremento de más de 9.000 en el mes de noviembre, lo que se tradujo en cuatro millones de euros más en pagos. La evolución de las prestaciones por desempleo también fue al alza hasta enero, donde se alcanzó un pico de 24,6 millones y 38.238 beneficiarios.

Los pagos por ERTE se han mantenido desde entonces estables, entre los 9 los 12 millones de euros, aunque los beneficiarios bajan desde el mes de diciembre de manera casi constante, con una importante reducción en abril de 4.000 trabajadores para cerrar el mes con 18.377 beneficiarios y 9,1 millones de euros en prestaciones.