Abanca da un paso atrás y renuncia a presentar la OPA sobre Liberbank

La unión de Liberbank con Abanca se ha desinflado esta mañana, después de que el banco gallego haya renunciado a presentar la Oferta Pública de Adquisición (opa) que, sin embargo, había anunciado el viernes.

El futuro de la entidad fruto de la unión de Cajastur-CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura pasa ahora por mantener la hoja de ruta en la fusión con Unicaja, como siempre defendió su dirección, encabezada por Manuel Menéndez, desde que se anunciaran las negociaciones en diciembre.

Desde que se diera a conocer el posible interés de Abanca por Liberbank y que este había mantenido negociaciones con algunos de los principales accionistas del banco de origen asturiano se han levantado muchas sospechas. De hecho, fuentes de su dirección llegaron a acusar al banco del asturvenezolano Juan Carlos Escotet de querer acceder a los libros para conocer detalles de un competidor y desde Unicaja se calificó de farol su propuesta. No obstante, la irrupción del banco gallego en la negociación de fusión supuso un enorme terremoto en los equipos directivos de las otras dos entidades.

La propia Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) censuró ayer el proceder de Abanca y le dio diez días para decidir si lanzaba o no la opa incluyendo, únicamente, condiciones admisibles de conformidad con el real decreto de opas. Criticaba también el ultimátum dado por el banco gallego al consejo de Liberbank, al que el viernes apremió para que en el plazo de una semana le dejara acceder a sus cuentas para realizar una revisión confirmatoria de los aspectos financieros de la entidad y así poder confirmar su oferta.

Ante la posición de la CNMV, el consejo de Abanca se reunió ayer hasta entrada la noche y esta mañana confirmó que tiraba la toalla. En un hecho relevante remitido a la CNMV señaló que «Abanca y su accionista de control han decidido renunciar a su interés de promover la posible operación corporativa entre Abanca y Liberbank y, en consecuencia, no formular una opa sobre Liberbank».

Nada más conocerse la noticia, los títulos de Liberbank se han desplomado hasta un 12%, aunque la caída se ha ido moderando a lo largo de la mañana. Se trata de un efecto normal en el mercado, después de que sus acciones se dispararan el viernes casi un 20% al conocerse el interés de Abanca, que ofrecía una prima del 44% en relación al cierre de la sesión del jueves.

Abanca argumenta que, teniendo en cuenta el plazo de diez días que impone la CNMV, no le resulta posible realizar una revisión confirmatoria ('due diligence') de determinados aspectos relativos a Liberbank y su grupo, ni por tanto, como se indicaba en la carta remitida al consejo que dirige Pedro Manuel Rivero, tomar una decisión definitiva acerca de la posible formulación de una OPA.

Además, el banco de Juan Carlos Escotet defiende la petición que hizo el viernes. «La pretensión de Abanca y su accionista de control de realizar una revisión confirmatoria ('due diligence') con cáracter previo a la toma de cualquier decisión definitiva resulta totalmente legítima y constituye una práctica habitual en operaciones corporativas que afectan a sociedades cotizadas, incluyendo opas», argumentó.

Señala también Abanca que renuncia a la opa sobre Liberbank al considerar que esta sigue trabajando en la operación corporativa para una posible fusión por absorción con Unicaja., algo que, no obstante, ya conocía cuando inició sus movimientos de acercamiento a los accionistas de la entidad de origen asturiano.

En todo caso, Abanca y su accionista de control han dejado claro que en todo el proceso relativo a la posible operación corporativa con Liberbank, en el que reconocen llevar trabajando desde hace meses, su actuación en todo momento se ha desarrollado con «estricto cumplimiento» de la normativa aplicable y «guiada por la buena fe, extremando las medidas tendentes a la salvaguarda de la confidencialidad durante la fase preparatoria de la operación». «Únicamente a raíz de las indeseadas filtraciones, totalmente ajenas a Abanca y su accionista de control, y las noticias aparecidas en diversos medios de comunicación el pasado 22 de febrero y obedeciendo a la exigencia real y a requerimiento de la CNMV, se procedió a publicar el primer hecho relevante y a partir de ese momento, a tratar con la debida transparencia las sucesivas actuaciones», ha señalado la entidad.

Abanca es el grupo resultante de la fusión de Caixa Galicia y Caixanova, que recibió más de 9.000 millones de ayudas públicas y supuso pérdidas para el Estado superiores a 8.000 millones, pues el dueño de Banesco, Juan Carlos Escotet se hizo con él en subasta pública por 1.000 millones.

El banco siempre ha sacado pecho de su solvencia y niveles de capitalización, y se ha embarcado en procesos de expansión, como la compra de la red española de la Caixa Geral de Depósitos portuguesa, por la que se interesó también Liberbank.