Danone está dispuesta a negociar el futuro de la fábrica de Salas, incluida su venta

La sorpresa del anuncio de cese de actividad fue aún mayor si se tiene en cuenta, como aseguran en los ámbitos políticos locales, que la multinacional ha hecho en estos años ciertas inversiones para mantener la planta salense activa y en condiciones óptimas. «Aunque se vea antigua, está modernizada», señalan. Una opinión que contrasta, no obstante, con la visión sindical, la de un comité de empresa que hablaba este fin de semana de «mala gestión» empresarial y de optar por otras plazas, como Madrid, para desarrollar nuevas líneas de producción justificadas, fundamentalmente, «en el precio del transporte».

Aún así, la postura que se llevará esta semana a esos primeros encuentros para tratar el futuro de la planta salense, con 41 años de arraigo en el occidente regional, es la de reclamar «amplitud de miras» a la empresa. Se insistirá, entre las opciones para salvaguardar la producción en Asturias -reducida en los últimos años de las 30.000 toneladas anuales hasta las 11.000 actuales-, en esa apuesta por otras mercancías que tengan mayor aceptación en el mercado, como en su día ocurrió con el 'Danonino' u otros postres lácteos.

La única noticia 'positiva' del anuncio empresarial tenía a los ganaderos asturianos, unos 40, como protagonistas ya que Danone garantizó el viernes que «mantendrá relaciones con los productores lácteos locales para continuar abasteciendo a los demás centros de producción de la empresa». Eso será así al menos hasta el fin de los contratos que, no obstante, cabe recordar, se cierran con carácter anual.

Así las cosas, y a la espera de ver lo que ocurre estos días, las reacciones de rechazo a la noticia no dejan de sucederse. La más contundente a lo largo de todo el fin de semana ha sido la del presidente del Principado. Adrián Barbón volvió ayer a cargar contra una «inentendible» decisión. Lo hizo en Laviana, durante la I Muestra de Gastronomía Cántabra, donde compartió protagonismo con el presidente de la comunidad vecina, Miguel Ángel Revilla.

Incidió allí Barbón en la «falta de respeto» de la multinacional ante la ausencia de comunicación previa al Ejecutivo asturiano. También de «contundencia» en la respuesta, instando a la «unidad» de la sociedad regional, de partidos y sindicatos, «para defender lo que es una realidad: que la fábrica es rentable. No hay problemas económicos de la empresa. Es una cuestión de avaricia empresarial», repitió Barbón. Danone habló, en su comunicado del viernes, de «un proceso de racionalización, ante la necesidad de adaptarnos a las tendencias actuales y futuras del consumidor y garantizar, al mismo tiempo, la eficiencia de las operaciones industriales». Sin embargo, para el jefe del Ejecutivo regional está más que claro que «quieren reducir costes a base de despedir a trabajadores, cuando hay materia prima y de primera calidad, y hay mercado, el europeo. La industria agroalimentaria está creciendo sin parar, y no vemos justificación».

Un argumento, el del consumo y de la materia prima, que había esgrimido también el presidente cántabro momentos antes. Revilla hablaba del fenómeno de la «deslocalización» empresarial ahondando en la falta de justificación de la decisión de Danone para su factoría de Salas. «No tiene explicación en una zona donde tienen la materia prima a pie de obra, y de una calidad absoluta, y un mercado de consumo que es el europeo y el importante. No sé qué razones pueden aducir. Una empresa que son cien empleos entre directos e indirectos, para un pueblo es la vida o la muerte», aseveró Revilla.

Otro de los que volvía a salir ayer a la palestra era el coordinador general de IU. Y lo hacía desde el otro extremo, el oriente asturiano, donde planteaba esa necesidad de acompasar el desarrollo de Asturias «sin descuidar sus alas si se pretende lograr un equilibrio territorial y un modelo sostenible».

Ovidio Zapico recordó en Llanes que la industria agroalimentaria tiene que ser un «vector de futuro», algo, añadió, que se ve «coartado con decisiones como la de Danone de cerrar plantas», una situación «perfectamente extrapolable». «Asturias no va a volar sin sus alas: todo lo que pase en el oriente, como todo lo que pase ahora también en Salas va a afectar al conjunto de Asturias, a la identidad asturiana, al ser de Asturias».

El Gobierno regional y el Ayuntamiento de Salas estarán durante el periodo que dure la negociación en permanente comunicación para «coordinar» acciones frente al anuncio empresarial. Danone, asimismo, ha citado mañana a los representantes de los trabajadores para clarificar los planes de la empresa, aunque la única propuesta válida para la plantilla será la del mantenimiento de actividad.