Arcelor anuncia una parada del tren de chapa en medio de la negociación del convenio

La caída de pedidos provoca una nueva parada en las instalaciones asturianas de Arcelor. La siderúrgica, que ya detendrá este fin de semana el tren de alambrón, anuncia otra para el de chapa durante miércoles y el jueves de la próxima semana. Afectará a todo el personal de producción, unos 40 trabajadores por día. «La situación se está deteriorando», confirman fuentes de la multinacional, que insisten en que las previsiones que manejan para las factorías asturianas no son nada esperanzadoras.

Esta nueva parada se producirá el mismo día que se retoman las negociaciones del convenio regional, que afecta a más de 5.400 trabajadores. Los sindicatos de Arcelor han vuelto a unir fuerzas para forzar a la siderúrgica a mejorar su oferta. UGT, CC OO, USO, CSI y Aciaa -que se habían distanciado a raíz de las negociaciones fracasadas del acuerdo marco, el que regula las relaciones laborales de la empresa en España- presentaron ayer su plataforma conjunta y su propuesta, muy alejada de lo planteado por la empresa.

Arcelor, que insiste en que la situación de las plantas no permiten demasiadas mejoras salariales, aborda el asunto con dos propuestas. Si el convenio tiene vigencia de un año, estudiará un posible incremento para 2019. En el caso de que tenga una duración de tres años, propone una congelación salarial para los dos primeros y una subida para el tercero condicionada a los resultados. Además, ofrece una prima variable vinculada a la productividad y que no se consolidaría en la nómina y mantener el calendario vacacional actual de nueve tandas.

Los sindicatos, en cambio, defienden un incremento salarial del IPC al que añadir el 1,5% en 2019 y el 2% y el 2,5% para los dos años siguientes. Piden también el contrato relevo de la industria manufacturera para los nacidos antes de 1961, la contratación de 300 eventuales durante la vigencia del convenio y pasar a 7 tandas en el calendario vacacional de 2020 y en los sucesivos, además de una mejora del complemento por partir vacaciones, inversiones, mejoras sociales en los permisos retribuidos y la misma subida salarial para todos los trabajadores con contrato individual.

Con esta clara división de caminos, la negociación del próximo miércoles se presenta complicada. «Ya que en el acuerdo marco no hemos podido llegar a un acuerdo, esperamos que en esto nos vaya mejor», señaló Raúl Cueto, secretario general de la sección sindical de UGT en ArcelorMittal Avilés. La propuesta de la parte social «está mucho más ajustada a la realidad» en comparación con la presentada en el inicio de las negociaciones, hace ya ocho meses, defendió José Manuel Castro, secretario general de CC OO en la multinacional en España. Remarcó el «esfuerzo» realizado por la parte sindical para ponerse de acuerdo y reclamó a Arcelor que «muestre la voluntad para llegar a un acuerdo, porque ahora su posición es inmovilista».

Por otro lado, otra empresa del sector anuncia una reducción del personal, aunque en este caso lejos de Asturias. Se trata de Acerinox, el fabricante de aceros inoxidables, que este viernes comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su intención de llevar a cabo un ajuste de plantilla de hasta 300 personas en su factoría de Campo de Gibraltar (Cádiz) con el objetivo de mejorar su competitividad. Afectaría, por tanto, a en torno a un 13% de los cerca de 3.000 empleados con los que cuenta en la actualidad.

La decisión se enmarca, según la empresa, dentro de un plan de optimización organizativa de los procesos de producción, que abarca la paulatina digitalización, la búsqueda de eficiencia energética y sinergias en la fabricación y distribución.