Borrar
RufinoOrejas, presidente de Química del Nalón; Oswaldo Suárez, CEO del Clúster asturiano de Arcelor; Isaac Pola, consejero de Industria; Mariví Monteserín, alcaldesa de Avilés; Antonio Miguel Cervera, presidente de Sepides; José ManuelArias, presidente de Arcelor España, y Benigno Fernández Fano, consejero de Infraestructuras, ayer en La Granda. MARIETA
Arcelor garantiza que habrá siderurgia en Asturias «cuarenta años más»

Arcelor garantiza que habrá siderurgia en Asturias «cuarenta años más»

Se despide de sus baterías de Avilés y fía su futuro a las que reconstruye en Gijón, mientras que deja para hoy concretar el impacto del ERTE

Fernando del busto

LA GRANDA.

Viernes, 14 de junio 2019, 03:44

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Arcelor mantiene su apuesta por Asturias, al menos para las próximas cuatro décadas. De hecho, a pesar del mal momento que atraviesa el sector, su presidente en España, José Manuel Arias, insistió ayer en que no hay cambios en el programa de inversiones del grupo en la región. Lo hizo después de firmar con Sepides el contrato para el cese de la actividad de las baterías de cok de Avilés, una instalación que será sustituida por la que se reconstruye en Gijón y que entrará en servicio a medio gas a final de año, para completar su puesta en marcha en marzo, si no vuelve a sufrir retrasos.

Pese a las advertencias de la compañía en los últimos meses sobre las amenazas que sufre la siderurgia, Arias restó cierta importancia a la decisión de reducir su producción en Asturias, atribuyéndola a circunstancias del mercado. Para el alto directivo, su próximo reto en la región será «poner en marcha las baterías de cok que se están reconstruyendo en Gijón. En ellas vamos a aplicar las mejores técnicas disponibles de protección ambiental». Arias espera que con estas instalaciones «mantengamos la producción siderúrgica en Asturias, al menos, durante otros cuarenta años más y seguir siendo un centro productivo de ArcelorMittal en Europa».

En coherencia con lo apuntado por José Manuel Arias, el consejero delegado del clúster de Arcelor en Asturias, Oswaldo Suárez, recordó que tanto la inversión para la modernización de la LD III, como las previstas de mejoras medioambientales de las diferentes instalaciones productivas «se mantienen sin cambios».

Por otro lado, Suárez apuntó que la compañía debería analizar los niveles de producción de cok en un contexto como el actual de disminución de la producción. En este sentido, se manifestó en términos de prudencia sobre la aplicación del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que la multinacional tiene activo y que, todo apunta, utilizará de forma intensiva ante el recorte de la producción. Así, destacó que la medida se desarrollará «cuidando al máximo la parte social», aunque no avanzó cuáles serán sus efectos. Su prudencia se entiende perfectamente ya que la dirección Arcelor informará hoy al comité de empresa de las consecuencias en el ajuste de 700.000 toneladas de producción anunciado el pasado mes de mayo y la prolongación de la parada del horno alto 'B' de Gijón, que añadirá 100.000 toneladas de recorte mensuales.

Como avanzó EL COMERCIO, las cifras que barajan es que, al menos, el ERTE afecte a mil trabajadores, si bien es cierto que en momentos anteriores la compañía ha tratado siempre de minimizar el número de empleados afectados con formación o incluyendo cambios en el calendario de vacaciones.

Ayer, Oswaldo Suárez fue preguntado expresamente sobre la cifra de operarios que serán regulados, pero eludió aportar cualquier dato, indicando su confianza en el futuro de la actividad siderúrgica en Asturias.

En la reunión de hoy, también se pondrán sobre la mesa las inversiones de Arcelor en Asturias. Aunque ayer fueron confirmadas por la dirección en su integridad, una de las mayores incertidumbres de los sindicatos es el mantenimiento del calendario para las baterías de cok de Gijón. Son instalaciones de una gran complejidad y en las que llevará un tiempo alcanzar la plena normalidad en su producción.

Por su parte, el consejero de Industria, Isaac Pola, transmitió su respaldo a la compañía, recordando que la aplicación del ERTE se debe «a circunstancias coyunturales, de ámbito europeo», aseverando que la empresa buscará que sea «lo menos lesivo posible para los trabajadores».

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios